Este fin de semana e incluso el lunes venidero puede que se presente -y ojalá no suceda- el recibimiento traqueto de la Navidad. Institucionalizado en Medellín por los seguidores de Pablo Escobar, los primeros de diciembre se volvieron una demostración del poder de los explosivos que atemorizan a muchos, pero que son una clara muestra del desafío y el poder de esa economía emergente que hace estallar cohetes, culebras, petacas y toda suerte de triquitraques dignos de una película del terror o de una guerra civil en nuestras calles.

Y se da la competencia entre los vecinos a ver cuál estalla más explosivos en una actitud paranoica en la que participan grandes y chicos en un paroxismo que bien vale la pena analizar psiquiátricamente.

¿Por qué esa pasión por el ruido destructor y por no tener noches de paz? ¿De dónde nos viene esa inclinación por la pólvora ruidosa que es la antesala de la violencia destructora?

Los fuegos artificiales de luces multicolores, artística, decorativa, que inundaba los cielos con destellos espectaculares se ha ido degenerando en granadas y bombas como si estuviéramos en batallas campales, a lo que le falta sí los ululares de las sirenas para completar ese cuadro kafkiano inexplicable en una sociedad que dice querer la paz, pero disfruta con los sonidos de la guerra.

Y a todas estas, ¿de dónde salen tantos expendios de este tipo de pólvora? Entiendo que está prohibida su venta y más la de explosivos. Y se sabe que la llevan a domicilio y se puede pagar con tarjeta. Entonces, ¿cuál es el control?

Lo anterior para no hablar del daño infinito que se le causa a las mascotas y a la fauna que habita en nuestros árboles, especialmente en una ciudad en la que hacemos gala de que es el paraíso de miles de pájaros que con su trinar nos alegran la existencia.

Ojalá -repito- no vuelva a incendiarse Cali con esa pólvora guerrera como ha sucedido en los últimos años en la alborada decembrina.

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Posdata. El expoclásicos del fin de semana pasado reunió más de 280 vehículos de colección en el Club Shalom. Joyas de más de un siglo y bellezas automovilísticas de todos los años pudieron apreciarse en campo traviesa en un evento para toda la familia y a la altura de las mejores exposiciones internacionales. Fue el abrebocas para el próximo desfile de antiguos y clásicos de la Feria de Cali. Felicitaciones nuevamente a Francisco Pacho Rojas Pons por esta exitosa iniciativa.

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Posdata 2. El canalla atentado contra el busto del expresidente Valencia en Popayán y cuya cabeza la arrastraron por las calles de la Ciudad Blanca un grupo de delincuentes desadaptados, los mismos que hace pocos días trataron de grafitear la fachada del Templo de Santo Domingo y en buena hora fueron repelidos por la ciudadanía, es prueba de la ira y el rencor de quienes instan a la violencia.

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Posdata 3. Esta tarde a las 5:00 en la Plazoleta Central de Chipichape, será el recital de fin de año de Mario Fernando Piano y Sus Amigos en el que se presentarán Hernán Díez y su hijo Juan Sebastián (voz de Camilo Madrigal en la película Encanto de Disney), Jorge Humberto Grau y su Acordeón, More, joven artista y compositora colombiana brasileña, Rafael Gómez y su Show Flamenco, Mariana Rengifo Echeverri, estudiante del Colegio Jefferson, Rubén Darío Loaiza y su rumba española y Gustavo García con su acordeón romántica. Agradecimiento especial a Myriam de Orozco.

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Posdata 4. Nos Unimos o nos hundimos