En un gesto que resonó profundamente en los pasillos del Vaticano y más allá, el papa León XIV utilizó su primer encuentro oficial con la prensa internacional para hacer un firme llamado a favor de la libertad de prensa y la protección de los periodistas en todo el mundo. El líder de la Iglesia católica pidió la liberación inmediata de todos los reporteros encarcelados por ejercer su oficio con integridad, especialmente aquellos que arriesgan sus vidas en contextos de guerra o represión.

el papa León XIV utilizó su primer encuentro oficial con la prensa internacional para hacer un firme llamado. | Foto: Vaticano

Desde el Aula Pablo VI, y ante decenas de periodistas acreditados, el segundo Papa de las Américas expresó su solidaridad con los profesionales de la comunicación que se encuentran tras las rejas por contar historias incómodas para el poder. “La Iglesia reconoce en estos testigos el coraje de quienes defienden la dignidad, la justicia y el derecho de los pueblos a ser informados”, manifestó el Sumo Pontífice.

Las palabras del papa León XIV llegan en un contexto especialmente sensible. Según cifras actualizadas por Reporteros sin Fronteras (RSF), al menos 550 periodistas se encontraban privados de la libertad hasta el 1 de diciembre de 2024, y otros 55 permanecían secuestrados en distintas partes del mundo. Esta realidad fue descrita por el Pontífice como un “sufrimiento que interpela la conciencia de las naciones”.

El nuevo Papa también fue enfático al exhortar a los medios a no dejarse arrastrar por agendas belicistas. Solicitó rechazar el paradigma de la guerra y promover formas de comunicación centradas en la paz y la dignidad humana. “Solo los pueblos informados pueden tomar decisiones libres”, afirmó, destacando el rol de la prensa en la consolidación de sociedades democráticas.

El mensaje, que ha comenzado a circular ampliamente entre organismos de derechos humanos y organizaciones de periodistas, fue interpretado como una defensa frontal de la libertad de expresión y como una advertencia sobre los riesgos de la desinformación y el silenciamiento de voces críticas. León XIV también insistió en que, en tiempos de inteligencia artificial y manipulación digital, el papel de los comunicadores es más crucial que nunca.

Cabe recordar que el pronunciamiento del Papa se da apenas un día después de su petición pública por la paz en Ucrania y Gaza, escenarios donde varios reporteros han perdido la vida o han sido encarcelados mientras cumplían con su labor informativa.

El Pontífice, que lidera a más de 1.400 millones de católicos en el mundo, cerró su intervención con un reconocimiento explícito a quienes, a pesar de la censura, la violencia o el miedo, continúan relatando las historias que muchos quisieran ocultar. Un gesto que reafirma su compromiso con una Iglesia cercana a quienes no tienen voz.