El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declarará este jueves la "emergencia de salud pública" por el abuso de analgésicos opiáceos, culpables de la muerte de una media de 91 estadounidenses al día, indicaron altos funcionarios.

Se esperaba que Trump cumpliera este jueves con una promesa que hizo en agosto pasado y declarara "emergencia nacional" la adicción a los analgésicos, lo que habría permitido al Gobierno destinar nuevos fondos a esta crisis, así como intervenir en la industria farmacéutica para abaratar el precio de algunos medicamentos.


En vez de "emergencia nacional", Trump ha optado por declarar una "emergencia de salud pública", de manera que no se destinarán nuevos fondos a la lucha contra los opiáceos, pero se ordenará a todas las ramas del Gobierno que dirijan sus actuales partidas presupuestarias a esa crisis, detallaron funcionarios del Gobierno.