En medio de una escalada diplomática entre Estados Unidos y Colombia, Donald Trump arremetió una vez más contra el presidente Gustavo Petro en una rueda de prensa ofrecida desde su despacho en la Casa Blanca, acusándolo de ser “un tipo muy malo que le ha hecho mucho daño a su país”.
El mandatario estadounidense afirmó que “Colombia tiene fábricas de cocaína, donde la producen. ¿Destruiría yo esas fábricas? Me enorgullecería hacerlo”, lo que se consideró como una amenaza para Colombia y advirtió que Washington tomará “medidas muy serias” contra Bogotá.
Por su parte, Gustavo Petro en sus redes sociales criticó las afirmaciones del estadounidense y aseguró que en su gobierno ha combatido el cultivo de sustancias ilícitas: “Cómo me sentiré de orgulloso que en mi gobierno se han destruido 10.366 laboratorios de producción de cocaína. Rubio no le ha contado a Trump, nadie le dice".
Estas amenazas de Trump marcan una ruptura significativa en la cooperación tradicional entre los dos países, sobre todo en materia antidrogas. Cabe mencionar que desde mediados de agosto, las fuerzas de Estados Unidos han bombardeado constantemente decenas de embarcaciones que Trump ha denominado narcoterroristas y en dichas operaciones han muerto más de 70 personas.
Una estrategia antidrogas denominada Operación Lanza del Sur, iniciativa militar que la Administración de Donald Trump ejecuta en el Caribe y el Pacífico cerca de Venezuela y Colombia que ha sido recibida con preocupación por parte de organismos de derechos humanos, que advierten sobre el riesgo de falta de supervisión internacional y estándares mínimos de rendición de cuentas cuando se desarrollan operaciones letales en aguas internacionales, sin tribunal ni garantía judicial.
Este agravamiento de las relaciones se produce justo después de que Estados Unidos decidiera descertificar a Colombia por supuesta falta de cooperación en la lucha contra el narcotráfico y agregar a la lista Clinton al mandatario Colombiano junto con algunos miembros de su familia e incluso gabinete, un golpe simbólico en la relación bilateral.
Ante esto, el presidente Gustavo Petro anunció que autorizó a la Unidad de Información y Análisis Financiero publicar la totalidad de sus cuentas y movimientos económicos.
Este nuevo episodio entre los países no solo afectaría la cooperación en seguridad, sino que también podría poner en entredicho proyectos de desarrollo vinculados a la política antidrogas, generando incertidumbre sobre la continuidad de la colaboración entre Colombia y Estados Unidos en temas clave como el combate al narcotráfico y la cooperación militar.