En un caso inusual que sucedió recientemente en China, un hombre que fue detenido se disfrazaba de mujer en las redes sociales y aplicaciones de citas, con el propósito de tener relaciones sexuales con otras personas del sexo masculino para grabarlos sin su consentimiento y así venderlos a través de internet.

El acusado fue identificado como Jiao y en las redes sociales se hacía pasar como ‘Sister Hong’ o ‘la hermana Hong de Nanjing’. Tras ser detenido, al sujeto se le imputaron cargos por los delitos de producción y distribución de material pornográfico, violación de la privacidad y riesgo a la salud pública.

El pasado sábado 5 de julio del 2025 fue el día en que fue arrestado por la Policía del distrito de Jiangning, cuando estaba en la ciudad de Nankín.

El pasado sábado 5 de julio del 2025 fue el día en que el hombre fue arrestado por la Policía del distrito de Jiangning, cuando estaba en la ciudad de Nankín. | Foto: X/@therealbuni

Informes periodísticos de medios locales como Hk01, informaron que esta persona hacía uso de accesorios básicos, como una peluca, maquillaje blanco en el rostro y un vestido, los cuales lo hacían pasar como si fuera una mujer. Mientras que en las redes sociales creaba una identidad falsa con filtros de voz y de embellecimiento.

Y es que Jiao se presentaba como una mujer que se ofrecía para tener encuentros sexuales de manera gratuita. Lo hacía a cambio de objetos como botellas de leche, frutas o aceite, y unos pequeños electrodomésticos.

Los encuentros sexuales tenían lugar en su apartamento y se grababan sin que las futuras víctimas lo supieran. Según lo revelado por CNN Chile, Jiao vendía estas grabaciones a un costo aproximado de 21 dólares (150 yuanes y 84.800 en pesos colombianos).

En cuanto a la cantidad de las posibles víctimas, las autoridades chinas señalaron que la cifra está entre los 100 y 1.600. Pero aún no está determinado. Entre ellas se encuentran estudiantes, trabajadores, empresarios, entrenadores, deportistas, hombres solteros y casados y algunos extranjeros.

En grupos de chat privados fueron difundidos los videos que mostraban rostros sin censura, lo cual derivó en que varias de las personas que veían el contenido empezaran a indagar las identificaciones de las víctimas.

De hecho, fueron creándose varias teorías y datos de desinformación. Uno de ellos afirmaba de manera falsa que la persona tenía 60 años de edad y había generado el contagio con VIH a más de 1.000 personas.

Por último, el tiempo de condena en prisión que recibiría Jiao, según lo estipulado en el Código Penal de China, sería entre tres y diez años. Pero esta podría incrementarse a más de diez años o cadena perpetua en caso de que se reporte lesiones graves o muertes en algunas de las víctimas.