La cantante estadounidense Sabrina Carpenter, una de las artistas pop más influyentes del momento, cuestionó fuertemente al Gobierno de Donald Trump luego de que una de sus canciones fue utilizada en un video oficial que muestra redadas del ICE contra migrantes.
El material fue publicado por la cuenta de la Casa Blanca en X y generó una ola de críticas. El video, que dura apenas 20 segundos, muestra protestas contra las detenciones de migrantes y también a agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas esposando a varias personas.
A esas imágenes las acompaña de fondo “Juno”, uno de los temas más virales de Carpenter y un clásico de sus conciertos.
Sin embargo, la frase “Have you ever tried this one?”, aparece en el clip superpuesta a escenas de persecución y sometimiento de migrantes. El mensaje publicado por la Casa Blanca remata la secuencia con un “Bye-bye” y emojis, lo que evidencia un tono burlón frente a la situación de los detenidos.
En el mismo post del Gobierno, la artista escribió: “Este video es malvado y repugnante. Jamás me involucren, ni a mí ni a mi música, en beneficio de su inhumana agenda”.
No es la primera vez que artistas de talla internacional exigen al Gobierno de Trump que deje de emplear su música en piezas de propaganda oficial. Hace apenas un mes, Olivia Rodrigo denunció que la Casa Blanca utilizó su canción All-American Bitch en un video que promovía la autodeportación de migrantes a través de una aplicación. “No vuelvan a usar mis canciones para promover su propaganda racista y llena de odio”, escribió entonces la artista.
Otros músicos como Rihanna, Pharrell Williams, Axl Rose, Neil Young, Adele, Queen y The Rolling Stones han hecho reclamos similares en distintos momentos de los últimos años, principalmente por el uso de sus canciones en actos o contenidos asociados a políticas antimigrantes.
Desde que regresó a la Casa Blanca en enero, Trump ha impulsado una ola masiva de deportaciones, una de sus promesas de campaña.
Las protestas provocadas por el aumento de redadas de ICE han causado disturbios en todo el país, particularmente en ciudades lideradas por demócratas, donde la administración Trump ha desplegado gran número de agentes.
Trump ha buscado desplegar la Guardia Nacional para respaldar a los agentes de inmigración y proteger sus instalaciones y edificios.
Su administración ha desplegado tropas en Los Ángeles, mientras que esfuerzos similares en Portland y Chicago han sido bloqueados temporalmente por cortes federales.