Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, se fue en contra de su homólogo chileno, José Antonio Kast, recientemente electo, señalándolo como líder de la Alemania Nazi y lo comparó con Adolfo Hitler.
Asimismo, en un discurso plagado de rabia, le exigió “respetar” a los venezolanos en ese país y cuestionó las promesas de expulsar a los migrantes irregulares, a quienes vincula con el aumento de la criminalidad en la nación austral.
Kast, perteneciente a la extrema derecha chilena, ha prometido deportar a los cerca de 340.000 migrantes venezolanos ilegales que viven en Chile, que salieron de su país huyendo de la pobreza generada por el régimen chivista liderado por Maduro y en busca de un mejor futuro
“Usted podrá ser seguidor de Hitler y educado en los valores de Hitler, usted podrá ser pinochetista convicto y confeso, pero cuidadito le toca un pelo a un venezolano, ¡A los venezolanos se respeta!”, dijo Maduro ayer lunes en su discurso durante su programa semanal de televisión.
“Señor Kast, tenga cuidado, ¿oyó? Deje quieto a quien quieto está, la migración venezolana tiene derechos, la constitución chilena se lo debe garantizar”, agregó e instó a los venezolanos para que regresen al país sin tener en cuenta la grave crisis social y económica que se vive a causa del régimen.
El presidente electo de Chile, José Antonio Kast, tomará posesión de su cargo el próximo 11 de marzo del 2026, convirtiéndose así en el primer mandatario de ultraderecha desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet, hace 35 años.
Kast llega para reemplazar al líder de izquierda, Gabriel Boric, quien a pesar de su ideología, ha condenado en decenas de veces al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
Desde su etapa como candidato, el nuevo jefe de Estado chileno ha vinculado el aumento de la criminalidad con la migración irregular, un discurso que cobró fuerza tras la irrupción de grupos extranjeros como el Tren de Aragua. Esta megabanda de origen venezolano fue declarada organización terrorista por Estados Unidos, país que la acusa de haber inundado su territorio de narcóticos y migrantes ilegales.
Aunque Chile continúa siendo uno de los países más seguros del continente, la percepción de inseguridad se ha instalado entre la población ante el incremento de homicidios y secuestros registrado en la última década. Este escenario ha marcado el debate público y ha dado sustento a propuestas de mano dura en materia de seguridad y control migratorio.
La elección de Kast fue saludada desde Washington por el presidente estadounidense, Donald Trump, quien lidera una campaña de presión contra el régimen de Nicolás Maduro mediante sanciones al petróleo venezolano y un inusual despliegue militar en el Caribe.
Trump se refirió al mandatario chileno como una “muy buena persona”, en una señal de afinidad política que anticipa una relación cercana entre ambos gobiernos.