La curiosidad por saber qué decían los titulares de periódicos y los libros la impulsó a volver a la escuela, gracias al apoyo del Instituto Chiapaneco de Educación para Jóvenes y Adultos.

En los periódicos "buscaba cualquier cosita, mirando si lo podía descifrar", explicó Lupita ojeando un periódico local del estado de Chiapas, en donde reside. "En seis meses saqué mi secundaria, todo eso a mí me ha motivado a querer saber, leer, escribir y servir", añadió entusiasmada.

Lupita es originaria de la comunidad indígena 'Vicente Guerrero', del municipio de Ocozocoautla. Es la mayor de cinco hermanos y no tuvo la oportunidad de asistir a la escuela con regularidad durante su niñez porque sus padres afirmaban "que la escuela era una pérdida de tiempo".

"La realidad es que yo quiero seguir estudiando, para seguir conociendo la ley de la vida" termina diciendo Lupita con contundencia.