Luego de que esta semana se diera a conocer que, el reconocido humorista y presentador de televisión estadounidense, Jimmy Kimmel, fue sacado del aire de manera indefinida luego de haber hecho algunos comentarios sobre la muerte de Charlie Kirk en su programa, nuevos detalles han salido a la luz sobre la decisión de la cadena ABC.
Según ha sido comunicado por diferentes medios, una vez ocurrido el impase, en el que el presidente Donald Trump “tomó partido”, los ejecutivos de ABC le habrían solicitado que saliera al aire y se disculpara. Sin embargo, este no dudó en escribir un fuerte monólogo.
Al parecer, Jimmy Kimmel planeaba “atacar” a Trump antes de ser suspendido, por lo que la Cadena ABC y su empresa matriz, Disney, aseguró entonces: “No podemos dejar que salga al aire esta noche”.
Las palabras que encendieron la furia de Trump contra Kimmel, fueron en referencia a que los seguidores del mandatario presidencial intentaban ganar puntos políticos con el asesinato del joven activista Charlie Kirk.
“La pandilla MAGA está tratando desesperadamente de caracterizar a este chico que asesinó a Charlie Kirk como cualquier cosa que no sea uno de los suyos y haciendo todo lo posible para sacar provecho político de ello”, dijo Kimmel en su monólogo humorístico.
Una vez dicho eso, fue el propio presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones, Brendan Carr, quien amenazara con tomar medidas contra Disney y ABC por las declaraciones de Kimmel.
“Podemos hacerlo por las buenas o por las malas”, advirtió Carr.
Ante ello, desde diferentes sectores coincidieron en que la suspensión hace parte de una clara censura a la oposición del presidente.
“No nos quedaremos callados mientras nuestras libertades se vean amenazadas por tramas y corruptelas. Cualquier cómplice deberá responder ante nosotros”, señaló el legislador demócrata Robert García.
Cabe decir que, antes de viajar a Europa esta semana, Trump presentó una demanda de 15.000 millones de dólares contra el New York Times. En el pasado ya logró indemnizaciones de ABC y Paramount, y en julio también interpuso una demanda contra el Wall Street Journal.
“Después de años de quejarse sobre la cultura de la cancelación, la administración actual ha llevado esto a un nivel nuevo y peligroso al amenazar rutinariamente con medidas regulatorias contra las empresas de medios a menos que silencien o despidan a los reporteros y comentaristas que no le agradan” reaccionó el expresidente demócrata Barack Obama.
El ahora retirado presentador David Letterman señaló de su parte que “ya vemos para donde va todo esto, ¿cierto? Medios bajo control. Y no es bueno”.