Al menos 21 personas han muerto en Estados Unidos en los últimos días a consecuencia de la ola de frío polar que ha afectado a las regiones septentrionales del país desde el martes y que hoy ha empezado a remitir tras días de batir marcas mínimas de temperatura.

El Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos (NWS) prevé que el desplazamiento hacia el este del aire polar provocará un rápido calentamiento y que el domingo muchas de las áreas que han registrado temperaturas por debajo de los -30 grados centígrados se sitúen por encima de 0.