Familiares, amigos y ciudadanos que se solidarizaron con la desaparición de los 43 estudiantes mexicanos retomaron las protestas para exigir la búsqueda de los jóvenes. Después de fuertes enfrentamientos con la policía local, cientos de manifestantes bloquearon el puerto aéreo de la ciudad turística de Acapulco, en México, impidiendo que los pasajeros ingresaran y salieran del terminal.