En un ambiente desolador también se respira alegría y esperanza. Ese es el panorama de la turística ciudad de Pedernales, una de las más afectadas tras el potente sismo de 7,8 grados de magnitud que remeció la costa ecuatoriana, hace un mes exacto.
En un ambiente desolador también se respira alegría y esperanza. Ese es el panorama de la turística ciudad de Pedernales, una de las más afectadas tras el potente sismo de 7,8 grados de magnitud que remeció la costa ecuatoriana, hace un mes exacto.
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En un ambiente desolador también se respira alegría y esperanza. Ese es el panorama de la turística ciudad de Pedernales, una de las más afectadas tras el potente sismo de 7,8 grados de magnitud que remeció la costa ecuatoriana, hace un mes exacto.