La autoría de las amenazas fueron atribuidas a Águilas Negras-Bloque Capital y 'Los Rastrojos'.

La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos denunció este miércoles una oleada de amenazas contra defensores y activistas por parte de las "bacrim", como llama el Gobierno a los grupos criminales herederos de los paramilitares desmovilizados entre 2003 y 2006."Los ataques y las amenazas a las defensoras y defensores de derechos humanos son muy preocupantes. Estamos dando seguimiento a estos hechos", afirmó el representante en Colombia de ese organismo, Todd Howland.En un comunicado, Howland agregó que su oficina está "en comunicación con las autoridades (colombianas) para que adopten todas las medidas pertinentes", al explicar que dichas amenazas se han venido dando desde la semana pasada.A través de octavillas, los grupos criminales "amenazan de muerte a personas y organizaciones que trabajan por los derechos humanos en el país, en particular organizaciones de mujeres", apuntó el funcionario.Uno de los panfletos, matizó, "fue dirigido específicamente contra mujeres" y "la autoría de estas amenazas se la atribuyeron grupos denominados a las Águilas Negras-Bloque Capital y 'Los Rastrojos': Comandos Urbanos".A esas se sumaron otras enviadas a organizaciones sociales en los departamentos de Nariño y Cesar, "en las cuales la autoría sería de grupos que se autodenominan "Anti Restitución (GAR)", contrarios a la devolución de tierras a campesinos desplazados en el pasado a causa de la violencia de los grupos ilegales.Por eso, Howland dijo que "más que medidas físicas de protección (...) se requiere una respuesta coordinada por las diferentes entidades del Estado y que se investiguen las causas de las agresiones, se sancione a los responsables y se implementen las medidas estructurales para enfrentar estos ataques".Asimismo, instó a las autoridades "a investigar quiénes son los autores de las amenazas" para posteriormente "juzgar y sancionar a los responsables y a las estructuras que puedan apoyarlos".Un informe difundido ayer por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) destacó que esos derechos siguen violándose en América Latina y citó específicamente el caso de Colombia, entre otros países, como México, Guatemala, El Salvador y Honduras, además de Brasil y Venezuela.Además, el pasado domingo la plataforma Somos Defensores, conformada por varias organizaciones colombianas defensoras de los derechos humanos, denunció que un total de 49 activistas fueron asesinados en 2011, año en el que las agresiones individuales crecieron un 36%.El documento, que fue presentado el martes ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, resalta que ese incremento se tradujo en 239 ataques entre asesinatos, amenazas, desapariciones forzosas, atentados, detenciones arbitrarias, agresiones con heridas y aplicación irregular del sistema penal, frente a los 174 actos intimidatorios registrados el año anterior.