Pinzón calificó el hecho como “un acto inaceptable, en donde por un error militar posiblemente fallece un ciudadano, pero además querían ocultar esa situación”.

El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, rechazó la actitud de los militares que al parecer estarían involucrados en la muerte del campesino Jhon Jeiber Mina Guazá, ocurrido el pasado fin de semana en zona rural de Guachené (Cauca). Mina Guazá, según denuncias de sus familiares, se dirigía junto con otra persona por zona rural de la vereda Potrero Grande de Guachené, y después de pasar por un retén militar, supuestamente fue baleado por soldados de la Tercera Brigada del Ejército y su cuerpo escondido. Por estos hechos, 30 uniformados fueron separados de sus cargos mientras se adelantan las correspondientes investigaciones. Frente a esos hechos, el Ministro explicó que “lo más importante” es que cuando el alto mando militar detectó “que había un hecho anómalo, inaceptable, violatorio de la ley, se abrieron las investigaciones disciplinarias”. Pinzón calificó el hecho como “un acto inaceptable, en donde por un error militar posiblemente fallece un ciudadano, pero además querían ocultar esa situación”, al referirse a los militares implicados en la muerte del labriego. “Eso es lo que resulta inaceptable”, insistió. Pese a la situación, el Ministro destacó que el Ejército le esté dando la cara al país para establecer exactamente qué fue lo que pasó. “Yo realmente valoro y felicito que nuestras Fuerzas Militares y de Policía cada vez más estén en esa actitud y me da cierta satisfacción. Lamento mucho el fallecimiento de ese ciudadano, porque eso nunca debió ocurrir, y lamento mucho que por falta de criterio las personas hayan actuado de manera deshonrosa, pero exalto de manera especial la transparencia la actitud de nuestras Fuerzas Armadas para poner la cara al país y contar exactamente lo que hay. Aquí no se aceptan falsos positivos, aquí no se aceptan situaciones ni comportamientos por fuera de la ley”, enfatizó el funcionario.