Se pasó de 65 asesinatos en el primer semestre del 2015 a 40 en el 2016. ¿Cuál ha sido la clave? La comunidad le explica.

Durante los primeros seis meses del año la Comuna 20, toda esa agrupación de casas y calles recostadas en un cerro coronado por una estrella, registró un total de 40 homicidios.  Se trata del semestre con más bajo número de muertes violentas de los últimos años en esa zona, que históricamente ha sido una de las más violentas de la ciudad y en donde durante el 2015 se contaron 118 asesinatos. Lea también: Bajan homicidios en 11 comunas de Cali; pero aumentan en otras nueve. El año pasado, entre enero y junio, Medicina Legal registró 65 homicidios en los 11 barios que componen esa comuna. Es decir, para este año, los casos han disminuido el 40 % con 25 asesinatos menos. En 2015, por otra parte, Siloé fue el barrio más violento de Cali, junto a Potrerogrande, cada uno con 37 homicidios.  En lo corrido de 2016, Siloé cuenta 12 homicidios y, según el capitán William Rojas, comandante de la estación de Policía La Sultana, que opera en Siloé, la tendencia  sigue siendo a la baja, por lo que se espera que para finales de este año el número de homicidios no supere los 22. ¿Cómo ha hecho la Comuna 20 para bajar los altos niveles de violencia que tuvo durante 2015? Tanto la Policía como los líderes comunales insisten en que hay dos explicaciones. La primera tiene que ver con el aumento de los operativos por parte de las autoridades para desarticular las principales organizaciones delincuenciales que tienen presencia en esa comuna.  Entre enero y junio, la Policía ha desarticulado las bandas delincuenciales denominadas ‘Los Bríñez’, Los Cocos’,  ‘Las Delicias’ y ‘La Capilla’, todas dedicadas a delitos como el microtráfico, el hurto, la extorsión y el homicidio.  “Se trata de un trabajo que busca, a través de labores de inteligencia, acabar con las organizaciones que son las principales generadoras de violencia en la comuna, debido a las disputas territoriales que mantienen”, señala el mayor Pablo Botero, comandante de la estación El Lido, que controla toda la Comuna 20. El capitán Rojas agrega que, además de los trabajos de inteligencia de la Sijín y la Fiscalía que permiten la desarticulación de las bandas, la Policía ha venido implementando una nueva estrategia de vigilancia en la zona alta de la comuna. De acuerdo con el oficial, gran parte de las labores de vigilancia se han concentrado en las escaleras del barrio, pues muchas de estas, debido a la imposibilidad de ser recorridas en moto, son usadas para el hurto. “Hemos desarrollado una estrategia especial en esos lugares para evitar que sean focos de inseguridad y para evitar que sean usadas por los delincuentes que huyen de las autoridades”, dice.  Además de eso, la estación de La Sultana dispone todo los días de 20 uniformados especialistas en combate urbano que siempre están en la zona alta de la comuna y que han sido  entrenados para patrullar en zonas de ladera.  “Esto es muy importante porque la Comuna 20 es particular debido a su topografía. Las operaciones allá son más complejas y las labores de vigilancia se dificultan más, sin embargo, la Policía se ha adaptado a la zona”, afirma el capitán Rojas. Trabajo con jóvenes, la clave Líderes comunales señalan que, más allá de las acciones policiales, las iniciativas para sacar a los jóvenes y adolescentes de la violencia y el consumo de drogas también han tenido una fuerte incidencia en la baja de los homicidios. “Las organizaciones de jóvenes de la comuna vienen trabajando con mucha fuerza y eso ha permitido ganar territorios que antes eran zonas de confrontación, disminuir los enfrentamientos entre bandas y sacar a jóvenes de grupos delincuenciales. Por eso la inversión en temas de intervención social es muy importante”, señala Einson Valenzuela, líder comunal y presidente de la organización Juventud, Arte y Vida, que enseña teatro y circo en la parte alta de Siloé. Valenzuela afirma también que la disminución de los homicidios en la zona se está viendo opacada por el aumento de los hurtos.  En Siloé, según las estadísticas de la Policía, fueron denunciados entre enero y junio de este año 111 hurtos, 40 casos más que en el mismo periodo del año pasado.  Según el  capitán William Rojas, la mayor parte de esos hurtos están ocurriendo en la zona baja de Siloé, y los responsables son jóvenes de la parte alta que bajan hasta esos lugares para realizar los hurtos. “La mayor parte de esos jóvenes son personas que tienen muy pocas opciones laborales y que incluso han desertado del colegio. La sociedad les tiene que dar oportunidades, y eso viene a través de los espacios de formación que ofrecen todas las organizaciones que hacen presencia en Siloé y la Comuna 20”, dice Einson Valenzuela.  Sin embargo, agrega el líder, a pesar de que ya se han formulado proyectos de intervención social para la Comuna, la Administración aún no ha desembolsado el dinero para su ejecución. “Bajar los homicidios es muy importante, pero si la inversión y las estrategias no se mantienen, uno no sabe cuándo se disparen de nuevo”, concluye Einson.  

Capturas en la Comuna La Policía Metropolitana ha realizado  un total de 73 capturas entre enero y junio de este año.  Otro de los frentes que se están atacando son los grupos  que se dedican a la extorsión en el barrio. Varios grupos, según la Policía, se dedican a cobrar extorsiones a comerciantes y habitantes de los sectores de la Comuna 20 bajo la amenaza de atentar contra ellos. El Gaula ha realizado varios operativos contra esos grupos.