¿Qué paso con los jóvenes Adrián Marcillo, de 30 años de edad, y Paola Tobar, de 26 años de edad, quienes transportaban quesos y eran oriundos de Guachucal, Nariño?
Esa es la pregunta que ahora familiares, amigos y periodistas de Popayán se plantean tras cumplirse quince días de la misteriosa desaparición de estos dos ciudadanos cuando se movilizaban en un camión por la vía Popayán-Cali y al parecer quedaron en medio de un retén de las disidencias de las Farc.
Este caso sucedió en la noche del miércoles 27 de agosto, cuando varios alzados en armas salieron al sector de El Túnel, Cajibío, de la vía Panamericana, para detener el tráfico de los vehículos y, al parecer, apoderarse de varios camiones; uno de ellos posiblemente el usado por la pareja para movilizarse desde Guachucal, Nariño, a la ciudad de Medellín.
Por eso, y tras atender las voces de auxilio de los usuarios de esta vía, a la zona llegaron varias unidades del Ejército, de ahí que se formó un intenso combate entre los disidentes de las Farc y los militares. En medio de esta situación un presunto disidente fue capturado, otro perdió la vida y se dio la incautación de varias armas de fuego de largo alcance.
En medio de la confrontación se presentó la incineración de un vehículo, donde, al parecer, tres personas fallecieron incineradas.
“Es un caso que aún es objeto de investigación, porque de manera preliminar se tiene que dos de las tres personas incineradas son esta pareja de jóvenes que salieron de Nariño y que posiblemente terminaron en poder de las disidencias de las Farc cuando ejecutaron este retén ilegal, y como los montaron en un vehículo que usaban para ejecutar este hecho delictivo, entonces al parecer ellos perdieron la vida luego que el mismo se incinerara”, explicaron por su parte integrantes del Ejército, quienes pidieron mantenerse en el anonimato.
Como por el momento no se tiene una versión oficial sobre este caso, amigos y compañeros de estudio de la joven adelantan una serie de actividades para obtener una respuesta concreta sobre qué pasó con la joven y las razones de su extraña desaparición.
“La desaparición de Angie Paola Tobar Calpa y de Jesús Adrián Marcillo en la vía Piendamó, Cauca, no es solo una noticia más: es la herida abierta de un país que sigue desapareciendo a su juventud para la guerra. Angie no es una cifra más, es una estudiante, una soñadora, una mujer que tenía toda la vida por delante", indicaron los integrantes del Colectivo Feminista Alto Putumayo.
Asimismo, el colectivo feminista denunció que “hoy la guerra nos la arrebata en la forma más cruel: con un retén ilegal de la guerrilla, con fusiles que no conocen de futuro ni de dignidad. Y mientras tanto, el Estado responde con lo de siempre: silencios, versiones confusas, promesas sin rostro”.
Mientras tanto, la Revista Semana publicó las versiones de las directivas de la Universidad de Nacional sede Medellín, las cuales confirman que Tobar Calpa cursaba su formación profesional en esta entidad académica.
“Mary Luz Alzate, la vicerrectora de la Universidad Nacional sede Medellín, dio una entrevista con Hora 13 sobre lo sucedido y exigió que sea puesta en libertad. Fue justo en el camino de regreso a Medellín. Ella venía de Nariño y en ese recorrido por tierra, para comenzar su semestre, ella venía para iniciar su ciclo de último semestre de ingeniería administrativa, y con esa situación se encontró, muy dolorosamente”, reporta la Revista Semana al exponer que aun la joven y su compañero son buscados por sus seres queridos.
Mientras tanto, las comunidades del municipio de Guachucal, Nariño, adelantan velatones y movilizaciones para exigir una respuesta frente a este caso, registrado en medio de las difíciles condiciones de seguridad que ahora registra la vía Panamericana, a su paso por el departamento del Cauca.