El rey Carlos III, que continúa su tratamiento contra el cáncer, bromeó el viernes sobre su estado de salud, afirmando: “sigo vivo todavía”, durante una recepción en Londres.
En un desplazamiento junto a esposa Camila a Walthamstow, al noreste de la capital británica, el soberano de 76 años, respondió con humor a un representante de la religión sij, que le preguntó cómo estaba.
“¡Sigo vivo todavía!”, respondió el monarca.
El rey de Inglaterra sigue desde principios de febrero un tratamiento contra un cáncer, cuya naturaleza no ha querido hacer pública la corona británica.
La salud de la familia real ha sido un tema de actualidad a lo largo de 2024, tras el anuncio, primero, del cáncer del rey Carlos III, y después, en marzo, del tumor de la princesa Catalina, esposa del heredero de la corona, Guillermo.
La nuera de Carlos III, que tampoco hizo pública la naturaleza de su cáncer, anunció en septiembre que había completado la quimioterapia.
El rey continúa su tratamiento, del que tampoco se han dado detalles. Hasta el momento, no se conoce cómo avanza el pronóstico médico del monarca.
Carlos III retomó sus compromisos a finales de abril, dos meses y medio después del anuncio de su cáncer.
Además, reanudó en octubre sus viajes al extranjero, realizando un desplazamiento de once días a Australia y Samoa, para una cumbre de la Commonwealth, en compañía de su esposa Camila, haciendo un paréntesis en su tratamiento.
Tras regresar de aquel viaje, Camila, de 77 años, sufrió una neumonía, que le obligó a cancelar varios eventos en noviembre.
Por otro lado, el príncipe Andrés, en la tormenta por sus relaciones con un empresario chino sospechoso de espionaje a favor de China, no participará con el resto de la familia real para Navidad, informaron el lunes los medios británicos. El hermano del rey Carlos III ya cayó en desgracia a causa de su cercanía con el difunto criminal sexual Jeffrey Epstein, por lo que estaba apartado de la familia desde hace tiempo.
*Con información de AFP.