Alfredo Arana V, presidente del Grupo Coomeva, se refiere a las causas del desorden en el sistema y lo que elevó los costos en las EPS.

Alfredo Arana Velasco, presidente ejecutivo del Grupo Coomeva, afirmó que los recobros provocaron la crisis financiera que hoy enfrenta el sistema de salud en Colombia. 

Recordó que ese problema comenzó a visualizarse desde el año 2008 y no se adoptaron las medidas del caso para frenarlos. El recobro de medicamentos, tratamientos y servicios es una figura creada para que más colombianos pudieran tener acceso a servicios no cubiertos en el Plan Obligatorio de Salud, POS. 

En su concepto el modelo del sector solidario será muy relevante en el posconflicto, es decir, cuando se logre la paz con la guerrilla.

El ejecutivo habló en el foro ‘En qué andan las cooperativas’,  que se realizó en Bogotá.

¿Ya están saliendo de los problemas que tuvieron con la EPS?

Realmente el tema de salud es un problema sistémico y dentro de ese sistema, que está inmerso en una coyuntura muy particular, nosotros tenemos una EPS. Hemos liderado y tomado la decisión de poner todas las cartas sobre la mesa. De pedirle al Gobierno, inclusive, que nos tome como ejemplo para buscar soluciones, hemos propuesto muchas alternativas y estamos seguros que Coomeva encontrará la salida y que servirá de plataforma al Gobierno para presentarle al país formas de recuperar las EPS e inclusive incidir positivamente en el sistema de salud colombiano. 

En términos médicos puede decirse  que ¿el cáncer son los recobros?

Definitivamente sí. El gran problema del sistema de salud se inició en 2008, cuando se impuso la obligación de atender los servicios que no eran parte del POS y luego recobrárselos al Gobierno. Desde ahí empezamos un gran desorden en el sistema, una disparada tremenda en los costos y esto es lo que llevó a una insuficiencia en los flujos de recursos que es lo que tiene una situación tan crítica, porque esto es una cadena: Fosyga no le paga a las EPS, las EPS no le pagan a las IPS y eso es lo que hoy estamos viendo en el país y es necesario intervenir.

En el caso concreto  de Coomeva, ¿cómo está la situación de los recobros? y ¿cómo han avanzado entre los años 2008 y 2015?

 Nosotros en 2008 no deberíamos tener ni $50.000 millones en cartera y hoy tenemos $780.000 millones por cobrar al Fosyga. Unos recursos que a su vez nosotros hemos financiado, con recursos propios de la empresa; con capitalizaciones que han hecho los dueños de la EPS; y con una deuda con los prestadores, o sea con las IPS, que hoy suma más de $550.000 millones. 

¿Qué papel va a jugar el sector solidario en el posconflicto?

En el posconflicto las cooperativas tendrán una gran oportunidad de aportarle al país su  modelo de empresa, que podría funcionar en todos los sectores de la economía: industria,  agroindustria, servicios, servicios públicos inclusive, entonces el sector cooperativo, definitivamente como un modelo de organización, de empresa solidaria, tiene una gran oportunidad de servirle al país en el posconflicto.

¿Qué experiencias pueden traer  para que jueguen un papel determinante en regiones más afectadas por el conflicto?

No exactamente experiencias del pasado. Hoy y siempre las cooperativas se han movido organizando comunidades, procurando ayudar comunidades y a través de la propia organización de ellas procurando la solución de las  necesidades que tienen. Específicamente uno pudiera decir que en el sector salud hay que seguir trabajando y organizando. 

Los servicios públicos también son una gran oportunidad para el sector cooperativo. Vemos casos como el de Colanta en sector agropecuario, indudablemente que tenemos ahí una gran oportunidad para servirle al país a través del modelo cooperativo. Lo interesante de este modelo y el porqué es tan importante su promoción, es porque permite organizar empresas de gran potencial de desarrollo con poco capital, con aporte de muchas personas.

¿Cuál es el porcentaje de la participación del sector cooperativo en la economía?

Yo estimo que la participación del sector cooperativo colombiano es de 3,5% del Producto Interno Bruto (PIB). 

¿Y pudiera ser más?

Claro, en algún momento fue mucho más. Algunos años atrás hablábamos de  que estábamos en 5% y 5,5% del PIB, pero a raíz de  situaciones que hemos vivido, como la desaparición de los bancos, retrocedimos, pero hoy hay una nueva dinámica que nos ha llevado a tomar un nuevo aire y un buen crecimiento. 

A propósito, Bancoomeva  va para el quinto año de operaciones ¿cuál podría ser ese balance?

De nuestras 16 empresas, 15 arrojan un resultado extraordinario y el banco es uno de ellos. Esta experiencia nos está mostrando que tomamos un buen camino al separarlo de la cooperativa, al especializarlo en una empresa independiente y al darle un modelo de gobierno distinto al de la organización cooperativa. 

Eso se traduce en que hoy tenemos un banco que se convierte en un punta del desarrollo para la cooperativa y de muy buenos servicios para nuestros asociados y en una fuente de buenos resultados para toda la organización. 

¿Cuántos clientes tiene y en qué sector está enfocado?

Es un banco mediano, estamos llegando a $3 billones en cartera. Nos hemos enfocado casi en forma exclusiva a atender a los asociados de la cooperativa.  Podemos estar hablando de unos 280.000 clientes de los cuales 240.000 son de la cooperativa. 

¿Y alguna línea nueva de crédito?

Nosotros como cooperativa, aunque de acuerdo con la clasificación de la cartera tenemos mucho crédito de consumo, estamos muy interesados en  el crédito para  la educación.