El Freddy Rincón que vieron las nuevas generaciones fue el comentarista deportivo. Un campo donde también mostró su personalidad, pues siempre fue un hombre directo, sin filtros y sin pelos en la lengua.

Durante un año, el emblemático exjugador de la Selección Colombia trabajó en La Polémica de Win Sports al lado de los periodistas César Augusto Londoño, Óscar Rentería y Hugo Illera.

César Augusto lo recuerda como un gran compañero, que siempre quiso aprender cómo aparecer en las cámaras y cómo expresarse para poner en conocimiento de las audiencias su experiencia para analizar el fútbol de una Selección Colombia que amó hasta el final.

“¿Estuvo bien como lo dije?, ¿Fui muy duro?, ¿Se entendió lo que manifesté?”… eso nos preguntaba siempre cuando hacíamos el programa de televisión. Tuvo esa gran virtud Freddy, le gustaba escuchar y aprender”, relata César Augusto.

Recuerda el periodista que fuera de cámaras Freddy era un hombre muy tímido en su faceta como jugador.

“Alguna vez consulté a Pacho Maturana para escribir un libro y le pregunté que si Freddy era volante 6 o volante 8, y Pacho me respondió: ‘No lo sé, Freddy nunca hablaba’”.

Era, continuó César Augusto, “un futbolista lejano a la prensa, les huía a las entrevistas, pero siempre fue respetuoso de los medios de comunicación”. Y, paradójicamente, terminó siendo comentarista del canal Win Sports, primero en La Polémica y luego en Lo Mejor de la Fecha.

“Cuando llegaba a Bogotá para las grabaciones, procedente de Cali, donde vivía, se encerraba en el hotel a ver televisión y dormir”, cuenta César Augusto.

Resalta que “sus comentarios siempre fueron directos, sin filtro, sin guardarse nada, así se equivocara. Pero también fue un hombre justo, porque cuando tuvo que cuestionar a James Rodríguez por sus actitudes, lo hizo, y cuando tuvo que resaltar sus virtudes, también. Decía que Colombia necesitaba de su jugador más talentoso, pero en la plenitud de sus condiciones”.

Hoy, desde arriba, desde la cancha que debe haber allá en el cielo, Freddy seguirá presente en la memoria de los colombianos y el mundo del fútbol, no solo por lo que fue la grandeza suya en la grama de un estadio, sino porque se atrevió a jugar también en el escenario de los jugadores que terminan siendo comentaristas, y allí también fue Freddy, Freddy Rincón.