El sábado le dio la victoria al equipo de Leonel, que quedó muy cerca de la Final. Con 19 años y en tres partidos, Rivas se gana el cariño de la hinchada caleña.

Paciente como un capullo que espera su metamorfosis, así aguantó Carlos Rivas. Resistiendo las adversidades, anhelando el momento preciso y exacto para abrir sus alas y mostrar su esplendor en Deportivo Cali.El sueño inició en Jamundí. Las calles de este municipio vallecaucano fueron las primeras espectadoras de un talento que se perfilaba. Con cholado en mano, Carlos empezó a endulzar su camino.Jamundí Fútbol Club fue su cuna, pero también el trampolín que lo lanzó en 2009 a las divisiones menores del América de Cali, equipo con el que puso a prueba su talento y fortaleza mental."En América me miraban por ratos pero nunca me pusieron cuidado, seguro había mejores jugadores y ellos fueron los escogidos", contó Rivas. El desafortunado paso por América no mató sus esperanzas en el fútbol. El delantero, siendo un joven de 15 años, comprendió que tenía que cambiar su rumbo. Un año después, Francisco Cortés descubrió su talento y destreza con el balón. Lo llevó a las divisiones menores del Once Caldas y muy pronto, de la mano del técnico Juan Carlos Osorio (que dirigía a los Blancos en 2010), empezó a labrar su sueño: ser futbolista profesional."Cuando estaba el profesor Osorio me dio la oportunidad de debutar en 2011. Fue contra el Real Cartagena y actué 70 minutos", recuerda Rivas sobre su debut a los 16 años de edad. En el cuadro de Manizales militó más de tres años, disputó 18 partidos en el torneo principal y más de seis en Copa Postobón. 'El Lord' Juan Carlos Osorio fue el primero en maravillarse con la destreza de Carlos Augusto Rivas. En 2013 terminó su proceso con el cuadro manizalita. Santiago Escobar no lo tuvo en cuenta para los compromisos de la Liga Postobón y la opción de compra, que ya estaba en proceso, se diluyó. "En Once Caldas duré casi cuatro años. Allá me iban a comprar y dieron la mitad del dinero de la transacción, pero al final no quisieron dar la otra mitad y me entregaron los papeles", detalló el atacante. A mediados de 2013, Rivas regresó a la capital vallecaucana, esta vez para probar suerte en las huestes azucareras. Su habilidad con el balón, su media distancia, su pase gol y su vocación de artillero conquistaron a Leonel Álvarez, quien decidió dejarlo en el equipo. Después de superar una lesión a comienzos de la Liga Postobón II y tras completar cinco meses en el equipo verdiblanco, Rivas inicia su proceso de consolidación en Deportivo Cali. Esa metamorfosis cautivó a la fanaticada en tres partidos. Los cuadrangulares fueron el instante esperado que aprovechó Rivas para salir del capullo y abrir sus alas, esas que hoy lo llevan con temperamento a ser la fórmula de gol de uno de los equipos con más historia en el fútbol nacional. "Ahora estoy muy contento en el Deportivo Cali. El 'profe' me felicitó porque hice las cosas bien y me dijo que siguiera así", expresa el joven ariete. El último sábado la justicia divina hizo de las suyas. Carlos, vestido de verde, le demostró a Santiago Escobar que tenía fútbol para marcar diferencia en la élite. Esa noche, en el Palogrande y a falta de tres minutos para el final, escrituró la victoria del Deportivo Cali, resultado que lo ratificó como líder del Grupo B en los cuadrangulares finales. El sábado que viene, en el Pascual Guerrero, Rivas se verá de nuevo con 'Sachi' Escobar, esperando repetir la historia y aportar con talento y goles para que el Deportivo Cali de Leonel Álvarez quede a un paso de la Final y más cerca de su nuevo sueño, ser campeón.