Las cáscaras de mandarina pueden ser iguales de provechosas que la misma pulpa de la fruta, pues contienen una serie de propiedades que le harán mucho bien a su organismo.

Así que la próxima vez que piense en botar esta parte de la fruta, reconsidérelo porque en sus manos puede estar la solución para estabilizar su salud.

¿Cómo ayuda la cáscara de mandarina a mantener su buena salud?

Para avalar estos conceptos, investigadores de la Unidad de Análisis de Alimentos de la Facultad de Farmacia de la Universidad Central de Venezuela evaluaron los compuestos de esta peculiar parte del fruto.

Como resultado de este trabajo, se concluyó que la piel de este cítrico ofrece una mayor concentración de polifenoles totales, una serie de compuestos químicos con gran poder antioxidante.

Esto hace que se convierta en una de las herramientas más poderosas contra el envejecimiento prematuro y una barrera contra enfermedades neurodegenerativas

Además, el estudio en mención hace referencia a otros beneficios como:

  • Más porcentaje de calcio que su pulpa.
  • Presencia de magnesio.
  • Un aporte significativo de vitamina C.
La mandarina es un excelente antioccidante | Foto: Getty

Una fórmula para reducir los triglicéridos

La cáscara de mandarina concentra fibra dietética, convirtiéndose en un alimento funcional cuando se trata de disminuir los triglicéridos.

De acuerdo a un artículo de la laAsociación Americana del Corazón, citado en el sitio Medical News Today, al consumir más fibras, los adultos con sobrepeso u obesidad pueden reducir sus niveles de triglicéridos y mejorar su salud general.

La cáscara de la mandarina es tan beneficiosa como la misma pulpa | Foto: Getty Images

¿Cómo consumir las cáscaras de mandarina?

Para aprovechar estos efectos, la opción que propone el sitio GastroLab es preparar una infusión casera, siguiendo estas instrucciones:

Ingredientes

  • 2 mandarinas.
  • 1 litro de agua.
  • Miel, stevia u otro endulzante natural (opcional).

Preparación

  • Lavar bien las mandarinas y pelar la cáscara con cuidado, evitando tomar la parte blanca ya que tiene un sabor muy amargo.
  • Hervir el litro de agua en una olla.
  • Agregar al agua las cáscaras y dejar que hiervan durante 10 minutos.
  • Apagar el fuego y dejar reposar la infusión
  • Colar.
  • Servir la infusión caliente o fría.

Si desea, puede agregarle un pequeño toque de miel para que le sepa más dulce.

Lo recomendable es que tome esta infusión de dos veces al día, luego de haber consumido las comidas principales.

Este remedio casero en ningún momento reemplaza el tratamiento que lleve con su médico especialista de confianza.

Es un complemento que puede colaborar a mantener los triglicéridos bajos, pero no es un remedio definitivo para esta afección.