El plástico a menudo se vuelve amarillento con el tiempo debido a la exposición a la luz solar, el envejecimiento y otros factores ambientales. Sin embargo, devolverles su color natural y restaurarlos sí puede ser posible con algunos buenos métodos de limpieza.
Uno de ellos puede ser la limpiarlas con agua tibia y jabón suave para eliminar la suciedad y el polvo. Y si hay manchas más difíciles, puede probar con una mezcla de bicarbonato de sodio y agua. Haga una pasta y aplíquela en las áreas manchadas. Deje actuar durante un tiempo y luego frote suavemente con un cepillo.
Incluso puede mezclar vinagre blanco con agua en partes iguales. La idea es aplicar la solución con un paño o esponja en las áreas amarillentas y frotar suavemente. No olvide dejar que la solución repose durante un tiempo antes de enjuagar con agua limpia.
Y si aún persiste el color, puede intentar también con una solución de blanqueador (cloro) y agua en una proporción de 1:1. Aplique esta solución en las sillas de plástico y deje que repose durante un tiempo breve. Enjuague bien las sillas con agua limpia para eliminar cualquier residuo de blanqueador.
Otras opciones de limpieza
- Pasta de bicarbonato de sodio y peróxido de hidrógeno: Haga una pasta con bicarbonato de sodio y peróxido de hidrógeno. Aplique la pasta en las áreas amarillentas y frote suavemente con un cepillo o esponja. Deje que la pasta repose durante un tiempo y luego enjuaga con agua.
- Protector solar para plásticos: Después de limpiar y restaurar el color, considere aplicar un protector solar específico para plásticos para ayudar a prevenir futuros daños por la exposición al sol.