El presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Ramón Jesurún, le salió al paso al escándalo en la dirección de la Selección española por el presunto cobro por partidos amistosos contra otros equipos, entre ellos Colombia.

“No recibimos dinero por el juego que tuvimos. Lo único que ellos nos pagaron fue el transporte interno en España y el hotel de la selección, pero absolutamente nada más. Incluso los dineros del hospedaje y alimentación no nos los han cancelado”, expresó el dirigente en diálogo con Caracol Radio.

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz sospecha que Gorka Villar, hijo del Presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Rfef, Ángel María Villar, se benefició de al menos diez partidos de la selección española contra otras selecciones, de las que acabó percibiendo cobros.

El equipo dirigido por José Néstor Pékerman enfrentó a España por amisto el 7 de junio pasado en Nueva Condomina, Región de Murcia. El juego quedó 2-2. 

Jesurún dijo fue una gira a costo de la Federación y aclaró que el señor Gorka sí tuvo una oficina de asesoría de derecho del fútbol entre el 2011 y 2012, pero que en la actualidad no tiene ninguna relación con la Federación de Fútbol de Colombia.

Señalamientos desde España 

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz hizo las consideraciones en el auto, en el que ha decretado prisión sin fianza para Ángel María Villar, su hijo Gorka y el vicepresidente de la Rfef,Juan Padrón.

Uno de los métodos utilizados, según consideraciones del togado, era el de la organización de partidos amistosos en la época más laureada de la selección española para beneficiar a la empresa del hijo de Villar.

Corea del Sur (en 2010 y 2012), Venezuela (2011), Chile (2008, 2011 y 2013), México (2010), Colombia (2011 y 2017) y Argentina (2009 y 2011) son los partidos bajo sospecha.

"En todos y cada uno" de los casos se aprecia una "inmediación temporal" entre el partido de la selección y la contratación de los servicios de la empresa de Gorka Villar y en algunos, como en el caso de Corea, Venezuela o Colombia se implica directamente en la negociación del partido.

De hecho, el de Corea de Sur de 2012 ni siquiera estaba en los planes aprobados por la Rfef y finalmente se impuso por decisión de Ángel María Villar, que además permitió que la federación coreana no pagara derechos comerciales ni de televisión.

El resultado es que la federación pasó de percibir 1,2 millones de euros de la empresa Matchworld (como estaba estipulado) a cobrar sólo 870.000 euros y además tener que pagar los gastos de alojamiento y manutención de la delegación.

Poco después de organizar el partido de Venezuela, la empresa de Villar hijo firmó un contrato con esa federación por 29.475 euros; en el caso de Chile fueron 36.000 euros y 48.000 en dos anualidades y así sucesivamente, lo que lleva a los investigadores a creer que esos contratos no son "fruto del azar", sino un resultado buscado y en el que influyó la posición de su padre.

Los contratos más lucrativos los alcanzó con la Federación Argentina, que pagó a la sociedad 120.000 euros en 2011 y 100.000 en 2012.