El presidente, Gustavo Petro, defendió la no extradición de Gabriel Yepez Mejía, alias ‘HH’, jefe del grupo comuneros del sur acusado del gobierno de los Estados Unidos por narcotráfico.
El caso fue una de las diferencias con el Gobierno que provocó la salida de Angela María Buitrago del ministerio de Justicia, acusando injerencias en su cartera.
El Mandatario aseguró que la ley permite zonas de concentración en los procesos más avanzados de paz y suspender extradiciones está dentro de sus atribuciones como mandatario. “Así se hizo en el pasado y se hará en el presente”.
Pese a las críticas de la política de paz total, Petro señaló que los procesos que se llevan con el frente 33 del EMC en el Catatumbo y el de Comuneros del Sur en Nariño, así como el de la coordinadora nacional guerrillera han llegado a “fases avanzadas”.
“Sé que hay sectores de la sociedad colombiana que quieren desbaratar estos procesos para demostrar que la paz no es posible. Pero la paz es posible y es el destino nacional”, escribió Petro en su cuenta de x.
El jefe de estado informó que para el avance de esos procesos de paz han utilizado una estrategia político militar: “ganar la población del territorio en conflicto transformando sus condiciones de vida, defender procesos de negociación serios y atacar a quienes no quieren dejar la violencia y martirizan al pueblo entregados a carteles extanjeros del narcotráfico y el oro ilícito”.
Esta decisión de no aceptar la extradición de alias ‘HH’ abre la puerta a que también cambie de rumbo el estado jurídico de aplaza decisión sobre Giovanni Andres Rojas, alias Araña, jefe del grupo de la Coordinadora Nacional Ejercito Bolivariano, que negocian la paz.
Araña fue capturado el pasado mes de febrero en un hotel de Bogotá tras una circular roja de Interpol. Sin embargo, asi como en el caso de “HH”, la última palabra frente a los requerimientos de la justicia de los Estados Unidos está en manos del presidente Petro.