En el centro, las ventas estorban a todo lo largo del corredor. Alarma por el deterioro.

La invasión del espacio público aledaño e, incluso, de algunos accesos a estaciones y troncales del MÍO está frenando el nuevo sistema de transporte masivo de los caleños.Pese a que este macroproyecto se hizo con el doble propósito de mejorar la movilización de los ciudadanos y de recuperar las zonas urbanas por donde pasa el sistema, los resultados en este último caso parecen desalentadores.En el centro de Cali el panorama es aterrador. Los andenes peatonales y espacio urbanos generados para la circulación y encuentro de la gente están totalmente invadidos de ventas ambulantes.A estos corredores no les cabe una sombrilla más de vendedores que impiden la circulación y dificultan el acceso de los pasajeros a las estaciones. Incluso, algunos triciclos con frutas y jugos se le están atravesando a los buses y ya ha habido accidentes por esta imprudencia.Alrededor de la estación Cañaveralejo, frente a Cosmocentro, están apareciendo ventas y en toda la Carrera 15, los talleres de motos se le atraviesan al sistema. Metrocali dice que ese control es responsabilidad de la Secretaria de Gobierno, pero pese a los operativos, ésta no logra despejar el espacio público.