El Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, Dagma, realizó ayer sábado 24 de febrero de 2024 un operativo especial de inspección, vigilancia y control, donde se identificó el daño ambiental causado por un proyecto de construcción que se adelanta en el sur de Cali.

La inspección se llevó a cabo con el fin de proteger las condiciones naturales de un predio ubicado en la calle 18 con carrera 115, que hace parte de la reserva ecológica distrital en la cuenca media del río Lili, por lo que el organismo de control impuso una medida preventiva consistente en la suspensión de la obra a la Constructora Bio-S.A.S., responsable de las intervenciones que se adelantaban en un predio privado ubicado en la comuna 22.

Un total de32.000 metros cuadrados de área de especial interés fueron protegidos en este operativo interinstitucional. Foto: cortesía Dagma para El País | Foto: El País

Sara Mercedes Rodas, subdirectora de Calidad Ambiental del Dagma, señaló que esta es un área ambiental de especial atención protegida por el Acuerdo Municipal 0527.

La Subdirectora reveló que, en visita previa, se le habían hecho recomendaciones a los constructores, entre ellas la de no intervenir el cuerpo de agua, instrucciones que según las evidencias fueron ignoradas.

“De acuerdo con el informe técnico adelantado por el personal de los grupos operativos de Flora Urbana, Flora Silvestre, Ecosistemas, Recurso Hídrico, Gestión Urbanística y Residuos Sólidos del Dagma, se evidenció el retiro de tubería puesta por la constructora en la derivación 4,7 del río Pance, ocasionando un cambio en los perfiles y la profundidad del afluente, afectando la margen protectora de la quebrada Gualí”, dijo Rodas.

Al respecto, María Fernanda Arbeláez, líder de Recurso Hídrico del Dagma, explicó que esta afectación fue constatada por el personal a su cargo en las labores cotidianas de inspección, vigilancia y control (IVC) que de manera rutinaria realizan por toda la ciudad. “La instalación de tubería en la derivación del río Pance, al parecer para hacer un puente y cruzar maquinaria, prendió una alerta y activó un operativo especial de la autoridad ambiental”, sostuvo.

El Dagma señaló que ninformará a la Fiscalía General de la Nación sobre los posibles daños a los recursos naturales y/o invasión de áreas de especial importancia. Foto: Cortesía Dagma para El País | Foto: El País

Por su parte, los grupos de Gestión Integral de Residuos Sólidos y de Gestión Ambiental Urbanística, identificaron la afectación de la margen protectora de la quebrada Gualí, causada por la disposición inadecuada de material de excavación, lo que generó la fragmentación de la conexión ecosistémica y la falta del programa de manejo ambiental de residuos de construcción y demolición por parte de la constructora.

Asimismo, los grupos de Flora Urbana y Silvestre identificaron la tala de 27 individuos arbóreos de las especies Vainillo, Mano de Oso, Siete Cueros, Martín Galvis y Uña de Gato; de los cuales 5 se encontraban en la margen protectora de la derivación 4,7 del río Pance. Además se evidenciaron podas antitécnicas a individuos arbóreos en un área de 300 metros cuadrados.

Cristian Alonso Carabaly Cerra, asesor jurídico de la dirección del Dagma, confirmó que se hará cumplir lo dispuesto en la Ley 1333 de 2009, para impedir la ocurrencia de un posible daño ambiental y se tomarán otras medidas de carácter administrativo concernientes a la revisión de si otras autoridades han otorgado permisos, “esto con el propósito de que estas entidades revoquen esas autorizaciones, además de informar a la Fiscalía General de la Nación las posibles actividades de daño a los recursos naturales y/o invasión de áreas de especial importancia”.

Así es como teniendo en cuenta las irregularidades halladas en el operativo, la obra fue suspendida debido a que la constructora no adoptó las recomendaciones técnicas hechas por la autoridad ambiental en una visita previa.

El Dagma ha fortalecido las actividades de inspección, vigilancia y control para proteger el derecho de los caleños de vivir en un ambiente sano. Foto: Cortesía Dagma para El País | Foto: El País

“Una vez la empresa que adelanta los trabajos en esta zona haga los cambios solicitados por el Dagma, podría reanudar la obra. Sin embargo, debido al incumplimiento, que ocasionó afectaciones en este ecosistema, se adelantarán sanciones, así esta entidad privada haga los ajustes correspondientes en su plan de trabajo, los cuales se deben adoptar siguiendo los requerimientos técnicos de carácter ambiental”, señaló Sara Mercedes Rodas.

Este operativo contó con el acompañamiento de integrantes del cuerpo de agentes de tránsito de la Secretaría de Movilidad y de la Policía Ambiental. Esta última sorprendió e impuso un comparendo a un grupo personas que se encontraban extrayendo, sin permiso de aprovechamiento, material vegetal para su comercialización en un lote contiguo a la zona intervenida en el operativo del Dagma.

La constructora no se ha pronunciado aún sobre este tema.