El médico Gabriel Ochoa Uribe fue el técnico más ganador en la historia del fútbol colombiano, ya que obtuvo siete títulos con el América (entre ellos, la primera estrella del equipo rojo, en 1979), cinco con Millonarios y uno con Independiente Santa Fe.
Su legado es enorme no solo para los hinchas de los clubes a los que dirigió, sino también a muchos de los que fueron sus futbolistas y que hoy en día son exitosos entrenadores, como es el caso de Ricardo el 'Tigre' Gareca y Julio César Falcioni.
Sin embargo, y como él mismo lo reconocería después, el único título que le faltó fue el de la Copa Libertadores de América, que el equipo rojo perdió tres veces con Ochoa Uribe desde el banco técnico, en 1985, 1986 y 1987.
En la gran final de 1985, fue Argentinos Juniors el que le quitó la posibilidad al rojo de ser campeón por los penales.
En 1986, el que se atravesó en el camino fue el también argentino River Plate, y en 1987 fue Peñarol. Esta última fue la final perdida más dura del médico.
Los 'Diablos' se estaban consagrando como campeones al empatar 0-0 en el partido de desempate frente a los uruguayos en Santiago de Chile, pero un gol en el último segundo de Diego Aguirre dio al traste con las ilusiones rojas.
La Libertadores fue esquiva para un técnico que, desde todo punto de vista, la mereció ganar.