Nueve alcaldes en cinco años

Cartagena es la ciudad con mayor renombre de Colombia, por eso preocupa la inestabilidad que ha rondado a su Alcaldía durante los últimos cinco años.

Entre mandatarios revocados por corrupción o que han sido sustituidos por ausencia total, la capital de Bolívar ha tenido ocho alcaldes en propiedad y encargados, desde el año 2012.

Y se apresta a escoger en elecciones atípicas al noveno luego de que el martes presentara su renuncia Manuel Vicente Duque, quien se encontraba apartado de su cargo desde el 1 de septiembre, cuando se le envió a la cárcel acusado de presionar la elección de la Contralora Municipal con el fin de conformar una red de corrupción.

La imputación de delitos también ha afectado en estos años a concejales y funcionarios de la Administración Distrital, lo que lleva a preguntar qué está pasando en Cartagena.

Lo que se puede entrever es que quienes se lanzan como candidatos a elecciones populares en la capital de Bolívar han olvidado el compromiso que tienen con quienes los eligen para dirigir los destinos de su ciudad.

Su deber es actuar de manera transparente, salvaguardando los recursos del Distrito, defendiendo los intereses de todos los cartageneros y trabajando para mejorar su calidad de vida. El servicio público se hizo para eso, no para obtener un lucro personal.

Cartagena merece buenos alcaldes y funcionarios públicos, que trabajen por ella para que siga proyectándose como la ciudad colombiana con mayor acogida y reconocimiento internacional.