Bien por Cali

¿Por qué hacerlo bien por Cali? Porque Cali se lo merece, lo necesita. Con el ánimo de exaltar esas pequeñas buenas acciones que nacen en todos los rincones de la ciudad, comenzó hace tres meses la iniciativa ciudadana ‘Por Cali lo hago bien’, liderada por El País y apoyada por once aliados estratégicos.

¿Por qué hacerlo bien por Cali? Porque Cali se lo merece, lo necesita. Con el ánimo de exaltar esas pequeñas buenas acciones que nacen en todos los rincones de la ciudad, comenzó hace tres meses la iniciativa ciudadana ‘Por Cali lo hago bien’, liderada por El País y apoyada por once aliados estratégicos. Durante todo este tiempo fueron muchas las historias que se contaron de esos héroes silenciosos que lo hacen muy bien por nuestra ciudad. Las historias llegaron de todas las formas posibles: correos electrónicos, llamadas, recomendaciones de amigos y colegas periodistas fueron sumando nombres a una larga lista de héroes anónimos. Si bien tres meses no eran suficientes para contar todas las historias de esos caleños que se esmeran por Cali, sí lo eran para dar a conocer sus esfuerzos, con la esperanza de motivar otros esfuerzos. Hace un año la cuota inicial del sueño se llamó ‘De Cali se habla bien’; así que esta era la evolución con la que aspirábamos a mostrar, de forma tangible y a través de muchos rostros, que era posible pasar de las palabras a los hechos.Esta campaña quiso exaltar a los nuestros que lo hacen bien por lo nuestro. Una posibilidad para generar consciencia colectiva de que en Cali suceden más cosas buenas que malas. 215 contenidos, entre notas, videos y galerías fotográficas) los mostraron. Por eso la historia de Mónica Sepúlveda y sus tres amigos, que todos los días salen a recoger las basuras de la ribera del río Cali.O la de Ana Beiba Lasso, que acoge en su propia casa a ancianos abandonados. O la de John Jairo Perdomo, el soñador que lidera el único teatro del oriente de Cali, Casa Naranja, teatro que es trinchera para los cientos de jóvenes que no han sucumbido ante la violencia que se vive en esa otra Cali de la que muchos hablan, pero pocos conocen. De historias como la de Mónica, Ana Beiba y John Jairo está llena la ciudad, y su aparición en este espacio era el cumplimiento de un deber del periodismo: dar voz a los que no la tienen para que se conozcan sus pequeñas proezas.Para que esas personas que hacen cosas buenas por Cali sigan siendo más, El País lanzó El Reto, una propuesta de participación que motivaba a la gente para que, a través del micrositio de Por Cali Lo Hago Bien, inscribiera buenas acciones que estuviera dispuesta a desarrollar. Participaron 1364 caleños. Y 30 de ellos recibieron un estímulo económico para que empezaran a ejecutar sus iniciativas.Hoy debemos agradecer a quienes de mil maneras se vincularon a la iniciativa. A las entidades y empresas que se vincularon al propósito de mostrar lo que nuestros vecinos hacen por su ciudad y su gente. A quienes contaron las historias que hoy nos llenan de orgullo y de esperanza. A quienes protagonizaron nuestras páginas con sus ejemplos de vida.En fin, a quienes con su ejemplo y su participación mostraron la Cali capaz de construir futuro por encima de las diferencias. Como dijimos el pasado domingo, “es el aparente final de un ciclo, pues, quizás apenas sea un nuevo comienzo; las buenas acciones, en últimas, no tienen punto final”.