Orden y autoridad

En esta semana se cumple el primer mes de gobierno de Alejandro Eder, como Alcalde de Cali, y Dilian Francisca Toro, en este nuevo período, como Gobernadora del Valle del Cauca. Época que es de acople de los equipos, ajustes administrativos, construcción de equipos y acuerdos para impulsar el Plan de Desarrollo que tendrán los gobiernos locales y regionales. Sin embargo, en este inicio se evidencian algunas de las prioridades de sus gobiernos, la articulación y liderazgo de sus secretarios, la capacidad de transformar y encontrar nuevas opciones.

En esta primera impresión brilla la cohesión de ambos gobernantes, tema ausente en las últimas dos décadas en el Valle del Cauca y que ha llamado la atención, no solo a nivel regional, sino en la esfera nacional. También un ritmo que atiende con agilidad las demandas regionales y locales, así como la presencia permanente en diálogos con la gente y escenarios de conversación; y por supuesto, el enfoque urgente en los desafíos de orden y autoridad que se ven reflejados en su apuesta por la seguridad regional.

Cohesión. La búsqueda permanente de puntos de encuentro para identificar escenarios de trabajo conjunto, que a su vez trasciende a sus secretarios y equipos de trabajo, contagia la unidad regional y marca el talante de colaboración, proyectos conjuntos y articulación regional. Mensajes fundamentales para el impulso de Cali y el Valle del Cauca.

El Ritmo. Ambos gobernantes están comprometidos con una agenda exigente, que entiende los desafíos y oportunidades regionales e invita a pensar en grande, con una agenda que pasa, tanto por las conversaciones en los territorios, la atención de los grandes temas de ciudad y Departamento, como por los diálogos con Ministros, Generales de la República y entidades internacionales.

Seguridad. Tal vez el tema de mayor urgencia para Cali y el Valle del Cauca. Las acertadas decisiones de la Gobernadora y el Alcalde con acciones concretas de recuperación de la seguridad son la muestra de que el desarrollo necesita del orden ciudadano y el respeto por la autoridad en cooperación con las Fuerzas Militares y de Policía. Así lo evidencian los recientes datos de reducción de homicidios en 20%, disminución de hurtos en 50%, y del 63% en el MÍO, así como la reducción de robo a mano armada, que ha bajado en 25% en lo corrido del año según las cifras parciales mostradas por el alcalde Eder esta semana.

Por el lado del Valle, la gobernadora inició con seis consejos de seguridad con autoridades de Cali, Palmira, Yumbo, Candelaria, Dagua, La Cumbre, Tuluá, Cartago y Palmira, así como el anuncio de una inversión de $36.000 millones de la Tasa de Seguridad para Cali y su Área Metropolitana. Anuncios del fortalecimiento de centros de reclusión, y compromisos concretos con el Fiscal General de la Nación y Ministerio de Defensa, que genera la llegada de más de 500 policías al Departamento, dando cuenta de una gestión política y operativa exitosa.

Va menos de un mes de gestión, se siente un nuevo aire en el liderazgo y en la actitud de los ciudadanos que nos ha invitado a todos a trabajar más colaborativamente y a entender la corresponsabilidad que como ciudadanos, gobernantes, empresarios, y líderes institucionales, tenemos en el desarrollo de nuestra ciudad y región.

Pero ojo, son solo 28 días, y en ese contexto, debemos manejar las expectativas para moderar los afanes y no empujar a nuestros gobernantes a tomar decisiones apresuradas. Hay prisa, pero siempre debe haber pausa para visualizar el objetivo de largo plazo.