El empresario Francisco Lourido habla de su aspiración a la Gobernación del Valle

Francisco Lourido es hoy uno de los más caracterizados líderes del agro vallecaucano y así lo ratificó durante 11 años que estuvo al frente de la presidencia de la Sociedad de Agricultores y Ganaderos, SAG.
Recientemente se retiró del cargo para aspirar a la Gobernación del departamento en el 2019.

Asegura que el Valle está por sembrar. Es decir, que puede ampliar su frontera agrícola para convertirse en una futura despensa agroexportadora hacia el mundo.

¿Por qué se perdió ese calificativo de que el Valle del Cauca era la despensa agrícola del país?
​
Hay factores que indujeron en un momento esa situación. Y allí creo que el tema de la seguridad incidió mucho en el desarrollo agrícola del departamento y por eso mucha gente dedicó sus predios a la caña de azúcar, pero afortunadamente hoy estamos en otra situación.
Hay un compromiso inmenso de lograr que el Valle sea una despensa agrícola no solo de Colombia, sino del mundo.

A propósito, ¿cómo están hoy esas nuevas inversiones en el agro?
​
Hay una empresa holandesa que se llama Florius Flowers que ya firmó un contrato de alquiler de tierras por 30 años. Es un predio de la Sociedad de Activos Especiales, SAE, que se dedicará al cultivo de flores en el municipio de El Dovio. La promesa de ellos es la de generar 1500 empleos. La firma tiene cultivos en África y ahora lo harán en Colombia con exportaciones vía aérea y marítima.

¿Cuál cree que puede ser el fuerte agrícola regional hacia adelante?
​
Es una de las tareas importantes que se deben ejecutar. Es la de buscarle trabajo a la gente, especialmente en el agro. Cuando fui gobernador y visité los 42 municipios del Valle no es mucho lo que exige la gente, y casi siempre es empleo.

Con el sector agroexportador esperamos que hayan fuentes de trabajo sostenibles y dignas en el campo. Cuando existen estos procesos agroexportadores todo eso exige un sello de calidad, y no es otra cosa que cumplir estrictamente las normas que dice la ley en lo laboral.

En los 11 años al frente de la presidencia de la SAG, ¿cuáles son esos tres logros que caracterizaron su labor en ese gremio?
​
Algo que me enorgullece mucho es haber logrado una SAG para el pequeño agricultor. Dejamos una estructura con más de 150 profesionales del campo capacitados en dar asistencia técnica a esas personas.

Contamos con abogados para resolver todos los problemas de tierras y de organizar las asociaciones, además de trabajadores sociales. Igualmente disponemos de ambientalistas para que la agricultura que hagamos sea amigable con la naturaleza.

Otro logro es tener una agremiación muy sólida y el próximo año vamos a celebrar 95 años de existencia. Es una de los más antiguos de Colombia.

Asimismo, haber impulsado la diversificación de cultivos, porque creo que el Valle no está sembrado.

Precisamente, ¿cuál es ese potencial de siembras?
​
Podemos ampliar esa frontera agrícola en unas 500.000 hectáreas por sembrar, primordialmente en las zonas de ladera. En todos los municipios existe un potencial por explotar, y allí el gran reto es la región Pacífico. En esa zona sueño con una sustitución de cultivos ilícitos por coco, cacao, pescado y maricultura, que es cultivar peces en estanques.

Usted habla del Pacífico, ¿cómo sacar del atraso a esa región?
​
Creo que en el campo portuario el país y Buenaventura están bien, y así lo dicen personas como las de la firma Pacific Fruit que desde Rozo exportan piña, cítricos y aguacate. Es una ventaja que debemos aprovechar con mayor énfasis para impulsar precisamente el desarrollo de la Región Pacífico.

La idea de lanzarse de nuevo a la Gobernación del Valle, ¿está en firme y por qué?
​
Estamos de lleno comprometidos en lograr el favor popular. Creo que hay mucho por hacer, e independientemente de todo lo positivo que ha adelantado la gobernadora Dilian Francisca Toro, creo que hay un liderazgo que tenemos que recuperar. Y lo hago porque creo que tengo como aportar mucho con el conocimiento y la experiencia que adquirí a lo largo de los años.

El Valle del Cauca era el segundo departamento de Colombia y allá tenemos que volver, hay con qué porque estamos en una región privilegiada. Hay que aprovechar todas esas condiciones que existen de los pisos térmicos en favor de una agricultura más intensiva para lograr que el departamento sea exportador de comida al mundo. Es uno de los retos que tenemos para que este sea un nuevo departamento.

¿Cree conseguir las 50.000 firmas que se ha propuesto para lograr la nominación a la gobernación?
​
Esperamos conseguir muchísimas más. Es una oportunidad para escuchar a la gente. Quiero ser un gobernante muy cercano a las personas y que escuche sus problemas. Y ante todo que aporte mucho al tema del empleo en la región con un mayor desarrollo social y económico del departamento.

Francisco Lourido señala que la SAG debe continuar con el reto de la diversificación agrícola en el Valle y reforzar la asistencia técnica.
La idea, anota, es lograr que los pequeños campesinos puedan exportar en el futuro.

Sin duda, la diversificación es la gran apuesta para no depender solo de la caña de azúcar, dice.