Senado absuelve a Trump de los dos cargos por los que fue sometido a juicio político

Con 48 votos en contra y 52 votos a favor, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, fue absuelto del cargo de abuso de poder en el marco del juicio político que se adelantaba en el Senado de los Estados Unidos.

En la votación por el cargo de obstrucción al Congreso, una mayoría de 53 parlamentarios votó a favor de su inocencia, mientras que 47 lo consideraron "culpable".

El Mandatario estadounidense obtuvo los votos necesarios para superar el 'impeachment' tan pronto 34 senadores lo consideraron "no culpable".

Mitt Romney fue el único de los republicanos que votó "culpable", siendo el primero en la historia en votar a favor de la destitución de un presidente de su mismo partido. Para que la destitución hubiese sido efectiva, era necesario el respaldo de dos tercios de la cámara a alguno de los cargos políticos.

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Tras conocerse la decisión, Trump manifestó a través de Twitter que este miércoles entregará unas declaraciones públicas respecto a "la victoria del país sobre el chiste del juicio político".

El juicio político contra Donald Trump inició el pasado 21 de enero por unas supuestas presiones que habría ejercido el Jefe de Estado sobre Ucrania para que investigara al exvicepresidente Joe Biden, uno de sus posibles contrincantes en las elecciones presidenciales de 2020.

Según la oposición, Trump condicionó la entrega de cerca de 400 millones en ayuda a ese país europeo y una reunión con el presidente Volodímir Zelenski a su exigencia del anuncio de una investigación contra Biden.

En la madrugada del 22 de enero, el Senado definió las reglas del 'impeachment' tras trece horas de un debate de enmiendas en el que los demócratas intentaron incluir pruebas y testigos en el proceso.

Tras varios días de argumentos, la mayoría del Senado votó la no inclusión en el proceso de nuevas pruebas y testimonios, entre los que se encontraba la comparecencia del exasesor de Seguridad Nacional John Bolton. Esta decisión marcó el fin del juicio político, el tercero en la historia de los Estados Unidos, tras los procesos adelantados contra los expresidentes Andrew Johnson y Bill Clinton.