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Terrorismo y política

Los hechos se producen a diez días de las elecciones legislativas, en las que se definirá si el Partido Republicano mantiene sus mayorías o estas pasarán a manos de los Demócratas.

24 de octubre de 2018 Por: Editorial .

En medio de la polarización política que vive Estados Unidos y de los enfrentamientos que han generado las posturas y pronunciamientos de su presidente Donald Trump, es muy grave el hallazgo de paquetes bomba enviados a prominentes figuras y medios de comunicación de ese país.

Los hechos se producen a diez días de las elecciones legislativas, en las que se definirá si el Partido Republicano mantiene sus mayorías o estas pasarán a manos de los Demócratas.

Los destinatarios de los correos fueron el expresidente Barack Obama, la excandidata Hillary Clinton, el multimillonario George Soros y el presidente de la cadena de noticias CNN; paquetes similares habrían sido enviados al ex fiscal general Erick Holder y a la congresista Maxine Water.

Todos ellos son integrantes del Partido Demócrata o han sido críticos del presidente Trump, lo que hace pensar que esa es la razón por la cual fueron escogidos como blanco de los paquetes terroristas.

Ese es el peligro del lenguaje agresivo en el cual es notorio el presidente Trump con sus posiciones polémicas y las descalificaciones como antipatrióticos de quienes lo confrontan, para tratar de conseguir votos para sus partidarios.

Por ello, lo ocurrido no puede tratarse como un hecho aislado, provocado por algún loco al que se le ocurrió poner bombas.

Son acciones intencionales que buscan desestabilizar el ambiente político y la tranquilidad, lo que obliga a los Estados Unidos a evitar que la divergencia política se convierta en tragedia de terror.

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