Terrorismo puro

La minas antipersonas no son un arma de guerra. Son un instrumento, de los más crueles, que se usa para hacer terrorismo.Para el Valle del Cauca esa minas que aturden, desmembran o matan, no son una cosa lejana.Están puestas ahí no más, en zona de rural de municipios como Pradera y Florida, Tuluá y Buga, Buenaventura, por grupos armados y terroristas como las Farc.Que recurren a la barbarie sin importarles quién cae: un campesino mientras siembra sus tierras, un niño cuando va a la escuela, un soldado que cuida la patria.Este año las minas antipersonas han dejado en Colombia 281 heridos y 49 muertos. Doce de estas víctimas han caído en el Valle, en su mayoría trabajadores del campo que realizan su labor sin saber que ahí, oculto y silencioso, los espera un enemigo mortal.