¿Otra megafrustración?

Los caleños entienden que una obra de infraestructura vial pueda sufrir algún retraso debido a inconvenientes que aparezcan en su construcción.

Pero que avance con tanta lentitud como para que apenas se adelante un kilómetro por año denota incapacidad para llevar a buen término un proyecto.

Así ha pasado con la ampliación de la vía a Pance, una de las 21 megaobras aprobadas hace 10 años.

Después de aplazar varias veces la licitación, esta al fin se adjudicó en el 2015, aunque debieron pasar 18 meses más antes de que se iniciaran los trabajos.

En el camino, y luego de superar escollos por licencias ambientales e inconvenientes como el hallazgo de un muro de interés arqueológico, se anunció que sólo se intervendrían 4,1 kilómetros y no toda la vía.

De esos sólo se han terminado y entregado 900 metros, se anuncia la culminación de otros 2,7 Kms en el segundo semestre de este 2019 y se avisa que los restantes 1,4 kilómetros deberán ser resueltos por la próxima administración municipal.

En conclusión, si acaso se ha ampliado un kilómetro por año de esta obra que ya se cobró por valorización y por la cual hace tiempo pagaron los caleños.

¿No es acaso un despropósito llamar meagobra a la intervención de 3,6 kilómetros de una vía?

Ojalá esta no se convierta en otra megafrustración para Cali, se termine la ampliación de la vía a Pance y se le cumpla a la ciudad lo prometido.