Los subsidios de El Cerrito

Cuando se revisa el informe publicado ayer por El País sobre el enredo en que están los subsidios de 122 viviendas de interés social en El Cerrito, surge la pregunta sobre cuál es el papel de la Justicia Penal cuando se trata de castigar a quienes se roban los dineros públicos.Las pruebas demuestran que se ha recurrido al engaño y al fraude para desfalcar unos subsidios que fueron creados para apoyar a las familias de escasos recursos.Durante tres años, administración tras administración de ese municipio del Valle les han incumplido a los beneficiarios, en otra muestra de la politiquería y corrupción con que se manejan los dineros públicos.Y los responsables parecen estar de acuerdo para seguir engañando, mientras continúan haciendo política y rotándose en los cargos.Mientras no se impongan controles más estrictos y los castigos para quienes desfalcan los recursos del Estado sean ejemplares, casos como el de los subsidios de vivienda en El Cerrito seguirán ocurriendo.