La burla

Por conducir en aparente estado de embriaguez y fugarse para evadir la prueba de alcoholemia, al exconcejal de Chía Carlos Enrique Martínez le suspendieron su licencia hasta abril del 2014.Pese a la sanción que le impuso el Tránsito y a la destitución de la Procuraduría a su cargo, en menos de dos meses Martínez ha logrado tramitar dos duplicados del documento, como se comprobó cuando fue retenido en un control.Seguramente el exconcejal, quien ha recurrido a todos los medios jurídicos para dilatar el proceso y evitar que quede la sanción en firme, está esperando a que su situación sea resuelta. Sin embargo, sus acciones son una burla a la ley, pues mientras su documento siga suspendido legalmente no puede tener duplicados de la licencia.Martínez está obligado a acatar las normas del tránsito y a pagar los $1'768.600 que debe por su mala conducta ciudadana.