El horror
Pacientes con grilletes y cadenas en los pies, atados a postes, menores de edad encerrados en un cuarto subterráneo y con señales de castigos físicos.
Pacientes con grilletes y cadenas en los pies, atados a postes, menores de edad encerrados en un cuarto subterráneo y con señales de castigos físicos.
Eso fue lo que encontraron la Policía y el Instituto de Bienestar Familiar en un centro de rehabilitación de drogadictos en Palmira.
Es el cuadro de horror que retrata la peor bajeza contra la condición humana y el irrespeto al derecho que tiene toda persona a recibir un trato digno, sea cual sea su condición.
Hay preguntas que se deben responder, entre ellas por qué el lugar funcionó como IPS durante tres años sin tener permiso para ello y nadie indagó hasta ahora.
O cómo alguien contrató con ese centro conociendo lo que sucedía adentro y los métodos arcaicos que se utilizaban para supuestamente ‘rehabilitar’ a personas con problemas de drogadicción.
Entre los 105 pacientes que se encontraban al momento del allanamiento, había 17 menores de edad, dos adultos mayores y dos personas con discapacidad cognitiva que por igual eran sometidos al mismo trato denigrante.
Ante todo, ellos son seres humanos que debieron ser respetados y tratados con dignidad.
Gracias a las denuncias ciudadanas sobre las irregularidades que ocurrían en el lugar, las autoridades reaccionaron.
Ahora se espera que los responsables de administrar ese centro y realizar tan atroces tratamientos respondan ante la Justicia, y que hechos tan lamentables nunca se repitan en el Valle o en cualquier parte.