El ‘autogol’ del Bolillo

El grave error cometido por el director técnico de la selección Colombia le ha costado el puesto.Pese a que una de sus virtudes fue que logró unir de nuevo a los colombianos en torno a un equipo de fútbol que augura buenos resultados y el regreso a la Copa Mundo, el maltrato a la mujer no tiene excusa y por eso de nada valieron las suyas.A Hernán Darío Gómez se le olvidó su condición de figura pública y la gran responsabilidad que ello implica como modelo para la sociedad a la cual pertenece.La reprobación a los hechos que protagonizó es un mensaje contundente sobre una Colombia que padece el flagelo del maltrato a la mujer pero quiere erradicarlo. Y su dimisión es una lección para el país, aunque sólo ocurrió luego de que Bavaria, la empresa que patrocina a la selección, expresara que no estaba de acuerdo con la continuidad del Bolillo.