¿Cuál cambio?

La reforma que acabó con el Consejo Superior de la Judicatura y creó el Consejo de Gobierno Judicial, buscó darle transparencia y credibilidad al ente encargado de administrar la Justicia en el país.De ahí la importancia que tiene la elección de quien será el gerente de ese Consejo, y tendrá entre sus funciones decidir cómo se distribuirá el presupuesto de la Rama Judicial, que suma $2,5 billones, así como adelantar la transformación tecnológica necesaria para modernizar a ese Poder del Estado.Por eso preocupan los reclamos sobre el afán con el que se está haciendo el proceso, la escasa información sobre cómo se preseleccionaron los 22 candidatos o el porqué sus hojas de vida sólo se subieron a la red el fin de semana, dejando apenas dos días para ser analizadas.Ese no es el cambio que esperan los colombianos en un poder judicial urgido de reformas que le den transparencia, eficiencia y credibilidad.