Contra la impunidad

El nombre de Nelson Carvajal Carvajal está a punto de salir del vergonzoso listado de impunidad que ronda el asesinato de periodistas en Colombia.

Tras la batalla que ha dado la Sociedad Interamericana de Prensa durante los últimos 15 años, el caso será revisado hoy en audiencia pública por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Carvajal fue asesinado en 1998 en Pitalito (Huila) luego de denunciar actos de corrupción de la política local y como ocurre en la gran mayoría de estos casos, no logró ser resuelto por la justicia colombiana.

Y no se trata de hechos aislados. En Colombia hay más de un centenar de casos de otros periodistas que entregaron su vida en el ejercicio de su profesión y que la justicia nunca pudo determinar quiénes fueron los autores materiales o intelectuales.

La gran mayoría de esas muertes ocurridas fuera de Bogotá, como en el caso de Carvajal, y cuyo silencio envía una pésima señal a la prensa regional.

De ahí la importancia de que la Corte Interamericana de Derechos Humanos logre esclarecer los hechos que rodearon la muerte del comunicador huilense.

Porque indirectamente es un espaldarazo a ese periodismo de provincia que, a costa de su propia vida, ha impedido que la corrupción escale a niveles más altos.

Y sienta un gran precedente para evitar que la impunidad se convierta en una herramienta más de censura a la prensa en Colombia.