Burla a la democracia

Absurdo, sin sentido y una burla a la ley y a la democracia. No de otra forma se pueden calificar los intentos que hicieron para posesionarse los alcaldes electos de Moñitos y Los Córdobas, que se encuentran presos en la cárcel de La Picota.O la manipulación en que incurrió el mandatario elegido en Santana, Boyacá, quien a pesar de estar inhabilitado para ejercer cargos públicos por el delito de estafa, acudió a una notaría, se posesionó e inmediatamente nombró a una alcaldesa encargada en su reemplazo.Las maniobras en que incurrieron estos personajes, primero para elegirse y después para llegar al cargo pese a sus problemas con la justicia, son actos de cinismo y de alcahuetería que nada tienen que ver con los procesos democráticos.Si tanto les interesaba servir a sus comunidades, primero debieron resolver sus líos, y luego sí aspirar a la que es la más alta representación de la democracia.