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Un apoyo necesario

17 de septiembre de 2010 Por:

"El programa debe seguir y debe ser perfeccionado..."

Al descongelar $100.000 millones del programa Agro Ingreso Seguro, AIS, y anunciar un cambio en sus directrices para que los recursos lleguen a los pequeños y medianos agricultores, el Gobierno Nacional ha dado un paso en el sentido correcto. Sin desconocer la necesidad de llegar hasta el fondo de las investigaciones sobre abusos cometidos por algunos beneficiarios, es importante que se reconozca su eficacia para impulsar la productividad de la agricultura.Mucho se ha escrito y comentado sobre el AIS como un recurso oportuno para apoyar al agricultor en asuntos como los sistemas de riego o la comercialización de sus productos. Infortunadamente, la polémica sobre los delitos cometidos por quienes hicieron trampa para hacerse merecedores de subsidios ilegales, así como las fallas en el proceso de análisis y calificación de los proyectos por el Iica y los errores cometidos en la vigilancia de ellos han terminado por generar un manto de dudas y desconfianzas, además de incubar un pleito jurídico entre la Nación y la OEA, que puede tomar dimensiones preocupantes.Así mismo, no puede ser aceptable que se descalifique a los beneficiarios de AIS por ser compañías y empresarios con reconocida capacidad financiera. Esa es una campaña de desprestigio con claro interés político. Sin duda, en un país donde las arcas del Estado no son las más abundantes debe causar inquietud y polémica el que se le entreguen recursos públicos a quienes tienen una solvencia económica demostrada. Pero no parece justo que se les descalifique o que se cree un anatema sobre ellos, sin considerar que cumplieron los requisitos y los compromisos que el Estado les exigió. Lo que no obsta para repetir que la justicia y los entes de control deben investigar las irregularidades y las desviaciones que se denunciaron en su oportunidad. Y que los funcionarios que tuvieron a su cargo el manejo del programa deben aclarar sus actuaciones ante los órganos que así lo soliciten. Colombia está al tanto de esas investigaciones.Pero el programa debe seguir y debe ser perfeccionado, como lo propone el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Agropecuario, al anunciar la entrega de $100.000 millones para proyectos de riego del sector arrocero. Además, es el momento para revisar las quejas de muchos pequeños y medianos agricultores sobre el exceso de requisitos para tener acceso a los recursos del AIS. Quien conozca programas como los que ha desarrollado Vallenpaz en el norte del Cauca podrá darse cuenta de las bondades que ha significado para miles de familias campesinas el poder recibir la ayuda que les proporciona una iniciativa de la cual se han beneficiado más de 300.00 personas.En un país como Colombia, privilegiado por la calidad de su tierra, pero azotado por la inequidad y la violencia, el Estado tiene una deuda histórica con el campo y el campesino. Por eso, antes que liquidarlo, debe impulsar y mejorar programas que, como AIS, han demostrado ser efectivos, pese a los escándalos y las imperfecciones que los han puesto en medio de la polémica y el desprestigio.

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