El mar de plástico

Un material como el plástico que ofrece comodidad a la gente, se convierte en el gran enemigo del medio ambiente y se transforma en pesadilla una vez se ha utilizado y se desecha por ejemplo en el mar. ¿Seguirá el mundo indiferente ante esa realidad que hoy afecta a los océanos del Planeta o se decidirá alguna vez a hacer algo para frenar el daño que con sus acciones y omisiones le ocasiona al medio ambiente de la Tierra?

Para transportar al mismo tiempo 270 mil toneladas de plástico se necesitarían 10.000 camiones, cifra difícil de imaginar circulando uno detrás del otro por las carreteras de cualquier nación. Esa cantidad de un material que no se degrada y puede tener vida infinita es sólo una parte de lo que ha arrojado la humanidad a los mares del mundo.La ventaja que encuentra el plástico en los océanos es que las corrientes lo arrastran con libertad llevándolo de un lado para otro o al final depositándolo en el lecho marino. La desventaja para el Planeta es que la contaminación que produce no sólo destruye la vida marina sino que terminará afectando a las aguas que ocupan el 70 por ciento del globo terráqueo, donde se produce el 90% del oxígeno que respiramos y absorben la cuarta parte de los gases contaminantes, aquellos que contribuyen al calentamiento global por el boquete cada día mayor que le abren a la capa de ozono, con la cual la Tierra se protege de los rayos dañinos del sol.Para saber que esa es la cantidad mínima de plástico que flota en el mar, cinco fundaciones dedicadas a la conservación de los océanos, unidas en la organización 5 Gyres Institute, adelantaron desde el año 2007 una investigación que los llevó a navegar por el Planeta y a recopilar la información. Contrario a lo que se cree, la cifra fue inferior a la esperada: el cálculo era alarmante si se tiene en cuenta que la mayoría de las 300 millones de toneladas de esa materia prima que se producen en el año, terminan en las aguas marítimas. El descubrimiento es que a fuerza del vaivén de las corrientes así como por el roce constante, la basura plástica depositada en las últimas cuatro décadas se ha ido fragmentando en micropartículas y han terminado en lo más profundo del lecho marino. Son 4.000 millones de fibras microscópicas, de entre 1 y 3 milímetros, las halladas por cada kilómetro cuadrado. Allí está el faltante en los cálculos iniciales y una de las razones más importantes del deterioro que sufren los océanos de este Planeta.Entonces se comienza a entender, para mayor vergüenza de la humanidad por su responsabilidad en el deterioro del medio ambiente global, que el 35% de la fauna y la flora marinas haya desaparecido, el efecto que tiene la contaminación de los océanos en la economía mundial y lo que significa ello para 2.600 millones de seres humanos que derivan el sustento de sus aguas.Es así como un material como el plástico que ofrece comodidad a la gente, se convierte en el gran enemigo del medio ambiente y se transforma en pesadilla una vez se ha utilizado y se desecha por ejemplo en el mar. ¿Seguirá el mundo indiferente ante esa realidad que hoy afecta a los océanos del Planeta o se decidirá alguna vez a hacer algo para frenar el daño que con sus acciones y omisiones le ocasiona al medio ambiente de la Tierra?