El pais
SUSCRÍBETE

Agenda incompleta

"Siendo densa, la agenda legislativa parece incompleta por no contener los asuntos que más preocupan a los colombianos. Es el caso del sistema de salud, sumido en una crisis que no parece tener fin, mientras las Entidades Prestadoras de Salud están intervenidas o al borde de la disolución y se derrumba la red hospitalaria. Y la reforma a la Justicia que acabe con la impunidad y desate los nudos gordianos que impiden al Estado cumplir su principal obligación, la de dictar recta y cumplida justicia".

23 de septiembre de 2012 Por:

"Siendo densa, la agenda legislativa parece incompleta por no contener los asuntos que más preocupan a los colombianos. Es el caso del sistema de salud, sumido en una crisis que no parece tener fin, mientras las Entidades Prestadoras de Salud están intervenidas o al borde de la disolución y se derrumba la red hospitalaria. Y la reforma a la Justicia que acabe con la impunidad y desate los nudos gordianos que impiden al Estado cumplir su principal obligación, la de dictar recta y cumplida justicia".

Dos meses después de iniciada la legislatura, el Congreso de la República ya tiene para su estudio la agenda que acordaron el Gobierno Nacional y los dirigentes de la Unidad Nacional. Una ruta importante sin duda, en la cual no están incluidos aún varios de los temas más sensibles para la Nación. Fueron 15 los proyectos anunciados por el presidente Juan Manuel Santos y su equipo de gobierno, en asuntos como el Fuero Militar, la reforma al régimen penitenciario y la adopción de un código electoral que reemplace el adoptado en 1986, fuente de toda clase de dudas sobre el sistema con el cual se escogen a los representantes de la voluntad popular. También se formuló la iniciativa para adoptar cambios en las pensiones, largamente anunciada y discutida por sus implicaciones para el futuro de las finanzas públicas. Es pues una agenda densa, a la cual le quedan tres meses para ser evacuada. Al parecer, ya fueron superadas las diferencias e incomodidades que entre el Legislativo y el Ejecutivo causó el trámite de la mal llamada reforma a la Justicia. Ahora parece renacer el buen ambiente que llevó a uno de los anteriores Ministros del Interior a calificar como un ‘Congreso Admirable’ por su productividad en la aprobación de las iniciativas presentadas por el Gobierno. Entre los proyectos anunciados es importante destacar el Código de Convivencia que según el presidente Santos, “toca la vida cotidiana de los ciudadanos prácticamente en todos sus aspectos, y es una actualización del Código de Policía”. Así mismo debe destacarse aquel que reglamentará la Ley de Sostenibilidad Fiscal, instrumento valioso para darle orden al manejo de las finanzas públicas. Dentro de las iniciativas está la reforma tributaria que durante dos años anunció el exmininistro Juan Carlos Echeverry, en ocasiones con palabras como “hacer chillar a los ricos”. Dos años después, su sucesor anticipa que no habrá aumento en los impuestos. Que tampoco se producirá la reforma estructural que todos esperamos sino un ajuste para adecuar en algo la legislación y cerrar en lo posible los huecos por los cuales se cuelan la evasión y la elusión. Siendo densa, la agenda legislativa parece incompleta por no contener los asuntos que más preocupan a los colombianos. Es el caso del sistema de salud, sumido en una crisis que no parece tener fin, mientras las Entidades Prestadoras de Salud están intervenidas o al borde de la disolución y se derrumba la red hospitalaria. Y la reforma a la Justicia que acabe con la impunidad y desate los nudos gordianos que impiden al Estado cumplir su principal obligación, la de dictar recta y cumplida justicia. Cómo terminar con la impunidad, o impedir que el Consejo Nacional de la Judicatura siga siendo foco de clientelismo y malos manejos, es algo que se espera ya con impaciencia. Y cómo aprovechar la bonanza económica para resolver problemas como la pobreza y la desigualdad, son los asuntos que interesan a la Nación, así se insista en concentrar el debate sobre la supresión de los tres ceros a los billetes, medida intrascendente y costosa que no contribuye a mejorar la vida de los colombianos.

AHORA EN Editorial