El pais
SUSCRÍBETE

Presidente, es peligroso el helicóptero

Mi pareja Lulita Arango ve el noticiero conmigo y muestran a Iván Duque enfrentando los huracanes desde naves y helicópteros.

17 de noviembre de 2020 Por: Poncho Rentería

Mi pareja Lulita Arango ve el noticiero conmigo y muestran a Iván Duque enfrentando los huracanes desde naves y helicópteros. Con mentalidad de médica me dice que el huracán no puede arreglarlo él, que mejor no se exponga a un accidente de una avioneta o helicóptero en plenos huracanes y tempestades. Bravo Lulita, al fin un acierto en política (que no le gusta) y es cierto: ‘Accidente presidencial’, ni pensarlo, se nos cae la estantería. ¿Pediría Petro posesionarse pronto? No sé.

Sorpresa: sacudida la redacción, la gerencia y la nómina de la revista Semana. Hay más, don Felipe López Caballero para leerla tendrá que ir al supermercado porque como dueño no tenía suscripción, se la llevaban de la imprenta a su apartamento del barrio El Retiro. Extra: renunciaron las estrellas de Semana: Antonio Caballero, Vladdo, Alejandro Santos & Cia.

Para el periodismo colombiano hubo un banquete de caviar y salmón con el boroló que estalló en la revista Semana antes propiedad de don Felipe López, ahora propiedad total de la Casa Gilinsky. Que en el mismo paquete de “gracias por los servicios prestados” estuvieran nombres y apellidos sonoros y cercanísimos a expresidentes, sacudió a los colegas y me incluyo. Eterna pregunta: ¿Manda en un medio la línea informativa de los dueños o de los periodistas o en conjunto y miti-miti? No opino, pero en el capitalismo estamos. Punto.

Aleluya, esta noticia me la remitió una amiga: “El exalcalde de Neiva, José Pedro Joaquín Suárez, fue condenado a cárcel y le quitaron, vía expropiación, tres mil millones de los miles que se ganó en el contrato del estadio de Neiva”. Y ella añadió: “Se lo merece por indelicado, aplaudo que le quitaran la finca y la mansión”. ¿Por qué hay en Colombia tantas estafas con los auxilios para obras deportivas? Porque hacen trampas al construirlas y hay contratistas que se prestan para el tumbis.

Hubo estafas millonarias en el contrato al estadio futbolero de Neiva. Y alerta: el alcalde de Cali Iván Ospina planea darle millonadas al estadio Pascual Guerrero, ese monumental elefante que le cuesta millonadas cada dos años a los paga-impuestos caleños y que tuvo líos con las contralorías por indelicadezas. Ojo allí, dos concejales caleños ya opinaron: “Abran el ojo, allí hay gato encerrado”. Son las obras deportivas un menú exquisito para muchos que saben hasta fumar debajo del agua.
Doloroso y cierto, mucho pícaro explotó con chanchullos obras deportivas”. Y gastarán millones por miles y...

AHORA EN Poncho Renteria 1