Magistrados a la guillotina

Robespierre y Fouché y la guillotina vienen a la memoria. Hay gentes deseándola contra ciertos pillos novios de la Odebrecht. Y por Reficar, obra millonaria en Cartagena, la Contraloría puso a señores VIP en fea situación penal. Calientísimos están dos exmagistrados del curubito, los que elegían al Fiscal, al Procurador, los mega poderosos que atajaban reformas, hasta archivaron el computador de Raúl Reyes por capricho sobradón. Punto.

El domingo en Cali, un auto y el conductor ebrio, mató al oficial Bolívar de los Bomberos de Santander y a su esposa. Viajaban en moto. Balance amargo: tres huérfanos. ¿Quién los auxiliará educándolos? Punto.

Me preguntan en Bogotá de una emisora por Maduro. Sufre el infantilismo de izquierda, ama el show y el matoneo. Al micrófono dije más: “Luisa Ortega no se asila en Colombia. A Maduro toca cobrarle que a patadas expulsara, hace tres años a quince mil colombianos por un río seco. Los expulsó con los corotos al hombro, los humilló. Ese Maduro destruye a la izquierda sensata, no demagógica”. Punto.

Por negocios de miles de libros que les manejaba en Colombia, viví en Moscú tres veces de a 45 días. Eso duraban los tiquetes de Aeroflot, la aerolínea rusa, de pésimo acabado. Era el socialismo bloqueado y sin glamour. Moscú con Pedro Clavijo y María Arango Fonnegra, largas charlas caminando por la Plaza Roja, inclinados ante el ‘Tovarich’ Vladímir Uliánov, Lenin, el duro estratega que con 500 audaces se tomó el poder y fusiló a los Romanoff. Un golpe de mano bolchevique y exitoso. Qué pena, se cayó el socialismo, quedamos peor, en manos del capitalismo de gordísimo apetito. Viajo pronto a Moscú, ahora novia del capitalismo que soñaron destruir. Punto.

En Bogotá, ante unos políticos, escuché a Christian Garcés hablar de votos y política, de santismo y uribismo. Es aplomado, nada sectario. Irá al duelo electoral con optimismo. Ya puso 350 mil votos enfrentado a Dilian Francisca, una líder con peso y muchos votos, la pilosa gobernadora. Punto. Uribe contra Maduro. Uribe lo ataca e invita a los militares a que lo tumben y entreguen el poder a los civiles, ¿le harán caso? No creo. Punto.

¿Por qué los americanos guillotinaron a tres magistrados poderosos amigos fieles al Gobierno? Que me lo diga ‘Jovita’ Feijó, con ella tengo cita en el café Los Turcos.