El pais
SUSCRÍBETE

Grandes temas

La humanidad tras los desastres de la pandemia tiene que avocarse al análisis serio y minucioso de tres grandes temas: el cambio climático, las migraciones y la regulación de las redes sociales.

4 de abril de 2021 Por: Vicky Perea García

La humanidad tras los desastres de la pandemia tiene que avocarse al análisis serio y minucioso de tres grandes temas: el cambio climático, las migraciones y la regulación de las redes sociales. En reciente editorial de este diario se destacó la importancia del regreso de los Estados Unidos al seno del Acuerdo de París de 2015. Nadie, salvo el inefable y catastrófico Donald Trump, entendía que la primera potencia del mundo estuviera ausente del foro en el que se discute la suerte del planeta.

Se observan ya los lineamientos del progreso en los años por venir. El declive de la actividad económica vinculada a la combustión de hidrocarburos es definitivo. El motor eléctrico movilizará a la mitad del parque automotor del mundo hacia 2035 y los avances en la construcción de motores impulsados por electricidad para aeronaves son impresionantes. De la extracción de carbón ni hablar, porque hasta China, gigantesco consumidor, se está volcando hacia otras fuentes de energía.

Hacia 2050 la industria del petróleo subsistirá por los usos casi infinitos de sus derivados y en especial de los plásticos. Es prácticamente imposible prescindir de ellos. La sociedad tiene que educarse para el reciclaje que parte, como es natural, del uso racional de los artículos y utensilios de plástico, proscribiendo los desechables de un único uso. La madera verá un renacimiento sin precedentes no para ser quemada como lo hicieron nuestros antepasados sino para ser aprovechada en cuanto uso racional sea posible.

En este estado de nuestra civilización es imposible soslayar el tema del resurgimiento de migraciones masivas en todas las latitudes. Los dos grandes focos de atracción son Estados Unidos y la Unión Europea. Pero hay corrientes migratorias en América del Sur causadas sobre todo por las estupideces del régimen chavista, y en el sudeste asiático, generadas por la intemperancia de gobiernos militares como el de Birmania.

De todas las formas adoptadas por las migraciones la más inhumana es el abandono de niños en las fronteras de los países ricos, tal como está sucediendo en la línea divisoria entre Estados Unidos y México y en el costado sur de Europa. Es un insultante sofisma que los padres utilicen el argumento de que el abandono se hace para procurar el bienestar de sus hijos. La realidad demuestra que los menores objeto de este inicuo tratamiento se convierten en presa fácil de cuanto abusador existe.

Como tercer tópico de importancia se debe señalar la imperiosa necesidad de convenir a nivel global una regulación de las redes sociales. La humanidad simplemente no puede existir sin los avances tecnológicos que han sido suministrados por las llamadas cinco grandes. Pero su poder práctico se ha incrementado hasta el punto de que lograron acallar la voz del presidente Donald Trump, cuando éste soltó las riendas y avanzó en una loca carrera de incitación al odio. Por haber callado al energúmeno magnate la humanidad debe estar agradecida con los gigantes de la tecnología, pero su enorme poder necesita ser controlado. Desde luego que por la vía del acuerdo y no de la imposición.

***

Al precandidato Sergio Fajardo se le reconocen muchas virtudes, pero no se le puede exigir que controle las oscilaciones de la tasa de cambio. Por ello nadie entiende la investigación que se le ha iniciado, tratando de culparlo por no ser profeta cambiario.

AHORA EN Jose Felix Escobar