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En eso de cultura ciudadana y convivencia social, como en casi todo, los colombianos somos autodidactas.

5 de julio de 2020 Por: Carlos Duque

Declarar como “acceso carnal abusivo” la brutal violación de la niña Embera por parte de siete soldados es un exceso judicial violento.

Ya vamos en que la violación de niñas indígenas es una tradición en Colombia. La cultura del horror.

La manifestación más infame de la brutalidad masculina es el machismo armado.

¿Seguiremos mirando para otro lado mientras la peste machista acosa, abusa, viola y asesina mujeres y niñas?

Dejemos esa bobada de andar derribando estatuas y preocupémonos por ver como destituir funcionarios que se erigen como monumentos a la prepotencia, la corrupción y la estupidez.

Qué desgracia salir de un Fiscal cínico y perverso para tener que soportar ahora un Fiscal prepotente e inepto.

¿Qué pensará el cargo más importante de la Nación de los mensajes que le trae desde San Andrés el segundo cargo más importante de la Nación?

Yo le creo al Fiscal cuando dice que viajó a San Andrés en plan de trabajo. Para él la Fiscalía es un paseo.

Que el Fiscal llamó al CD para avisar que se iba a echar un paseo por allá.

Tenemos una Constitución adolescente y bonita que es violada sistemáticamente ante la mirada cómplice de los vigilantes. La cultura de la violación.

En eso de cultura ciudadana y convivencia social, como en casi todo, los colombianos somos autodidactas.

¿Para qué desodorante si no hay abrazos?

“Acosar no está bien, violar está muy mal”. – Frase encontrada en las redes.

Sigue en Twitter @_carlosduque