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¡Tengo fe!

A medida que pasaron los años fui perdiendo la fe. Hasta mandarla al mismísimo infierno.

6 de enero de 2020 Por: Aura Lucía Mera

Viví años aterrorizada recitando de memoria el catecismo Astete. Sobre todo con esa pregunta: “¿Qué es fe? Fe es creer en todo lo que no vemos porque Dios lo ha revelado”.

Tenía pánico de entrar en pecado si me preguntaba a mí misma: ¿Qué es todo lo que no vemos? ¿Cuándo lo han revelado? ¿Dónde está Dios? Y más pánico si trataba de entenderlo. El que no tenía fe se condenaba y punto.

“Y las almas de los condenados caen al infierno como las hojas de los árboles en el otoño”. No. No podía pecar, pavor de caer en esa paila hirviente por la eternidad, algo que no tiene fin, cual hoja de árbol en otoño.

Entonces decidí tener fe. Creer en todo lo que no veía, y punto. Palito en boca y tragar entero, no preguntar nada. De pronto una pregunta rara me podía aventar al fuego eterno.

Dios era un señor furioso de barba blanca, sentado en una nube con un bastón y a sus lados, Jesús con el corazón rojo abierto y la Virgen de manto azul. Arriba una paloma. Tampoco me atrevía a preguntar mucho por ellos, aunque sí los veía en las estampitas. Siempre rayos dorados los rodeaban, me decían que eso era ‘El Aura’, y yo me llamaba Aura Lucía, pero no me salía ningún rayito. Sin embargo, fe era creer en lo que no vemos. Chitón.

A medida que pasaron los años fui perdiendo la fe. Hasta mandarla al mismísimo infierno. Además habiendo sido excomulgada yo también sabía dónde iría a parar

No más dioses de barba, no más palomas, no más curas, ni más mensajes cifrados, ni confesionarios, ni absoluciones.

Iniciando mi recuperación de mi adicción al alcohol y las drogas, le pregunté a mi primer terapista, un sacerdote irlandés alcohólico anónimo, sobre la tal fe.

Su respuesta me fue mostrando de nuevo el camino espiritual: “Fe es confianza, Aura Lucía. Ten confianza en un Ser Superior como tú lo concibas, y te irá mostrando otras sendas. Aprende a confiar”.

Toda esta historia personal, para afirmar que tengo fe, confío y creo que la nueva gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, y el nuevo alcalde, Jorge Iván Ospina, harán un excelente mandato. Y tengo Fe en que el Valle y Cali seguirán progresando. Sí. ¡Aprendí a confiar!

Son sucesores de Dilian Francisca Toro y Maurice Armitage, que dejaron un punto muy alto. ¡Y ellos continuarán!

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Posdata.
El Comité Gestor del Festival de Literatura Oiga, Mire, Lea, que ya cumplió cinco años y es reconocido a nivel internacional invitó a Maria Fernanda Penilla, directora saliente de la Biblioteca Departamental, a formar parte del grupo.

Su experiencia será indispensable para seguir adelante. Ojalá la nueva Directora continúe con la asesoría de Catalina Villa quien es el puente entre los escritores invitados y la Biblioteca. Y con el equipo que se encarga de toda la logística. ¡Un engranaje milimétrico que no admite improvisaciones!

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Posdata 2.
Con lleno hasta las banderas, la Plaza de Toros de Manizales recibió ayer la primera corrida de su temporada taurina 2020. Ahí se dieron cita los jóvenes toreros Juan de Castilla, Luis Miguel Castrillón y el matador peruano Joaquín Galdós, con toros de la ganadería de Paispamba, de Enrique Álvarez.

La de Manizales es de las ferias más lindas de Colombia, ¡donde está la gente más querida del país!

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